¿Hay que permitir que los niños usen asistentes digitales para hacer la tarea?
Por Maureen Pascual (Especial para The Washington Post)
Las negociaciones nocturnas entre los niños y los padres sobre la tarea son, con frecuencia, complicadas. Eso se debe al drama que provocan las presiones de los padres, el cansancio de los niños y las altas expectativas. Así que es difícil criticar a alguien porque busque alivio. Algunos padres contratan profesores particulares para las tareas, pero otros recurren a un incansable asistente que se sienta en las estanterías de la cocina y ofrece respuestas amables y certeras a casi cualquier pregunta. Se trata del asistente digital en el hogar.
Amazon, Apple y Google ofrecen asistentes de voz que pueden funcionar como centros inteligentes en la casa. Según la firma de marketing ComScore, 18,7 millones de hogares estadounidenses tienen un asistente inteligente, y se proyecta un crecimiento más generalizado. Estos dispositivos realizan muchas tareas, entre ellas anunciar el clima, ayudar a encontrar un restaurante y encender la cafetera. Los altavoces inteligentes también empiezan a aparecer en las aulas. Una sesión en una conferencia para educadores se dedicó a las formas de utilizar Alexa, fabricado por Amazon, en clase.
Acaso una vez que los padres y los maestros comenzaron hacer diario el uso de sus asistentes digitales se hizo inevitable que los niños comenzaran a pedir ayuda a esos dispositivos para realizar la tarea. Pero si bien puede parecer lo mismo que preguntar a una persona, se trata de dos cosas muy diferentes. Imaginemos a un niño de ocho años sentado con una hoja de matemáticas en la cocina pidiéndole al altavoz las tablas de multiplicar. Mientras que un auxiliar conectado a internet simplemente escupiría respuestas sin parar, la mayoría de los padres recordarían al niño que quizás se trata de algo que ya deberían haber memorizado.
Permitir que un niño busque ayuda en un altavoz inteligente puede hacer que la noche sea más agradable pero también puede causar estragos en la base de su educación. Aquí surgen algunas preguntas para ayudar a guiar a los padres a decidir si dejan que los niños usen asistentes digitales como asistente de tarea.
¿Cuál es el propósito de la tarea?
Idealmente, la tarea refuerza el aprendizaje que tiene lugar en la escuela. Las mejores tareas no implican el aprendizaje de nuevos materiales en el hogar. Eso significa que la tarea es, a menudo, la práctica, la memorización o el puro ejercicio.
Si bien son tediosas, tales actividades constituyen la base de la capacidad de un niño para que luego pueda desempeñar habilidades superiores, como la aplicación de conceptos matemáticos complejos. La evidencia también demuestra que el conocimiento es un requisito previo crucial para la comprensión de la lectura. Los niños necesitan esta base porque el conocimiento es la condición necesaria para poner en práctica las habilidades.
Antes de permitir que un asistente inteligente ayude a los niños, determinemos el propósito de la tarea. Si requiere practicar una habilidad aprendida en la escuela o memorizar datos importantes, usar un altavoz conectado a internet podría dificultar su educación a largo plazo.
¿Cómo aprenden mejor los niños?
Pensemos en la lucha para aprender a atarse un zapato: requiere concentración, práctica, fracaso y mucha determinación. El mejor aprendizaje se produce mediante algo que el investigador en educación Robert A. Bjork llamó «dificultades deseables», o situaciones que requieren que trabajemos por el conocimiento. Estudiar en diferentes salas, crear sus propias preguntas de estudio y hacer pausas entre las sesiones son técnicas probadas para el material de aprendizaje. Cada una obliga al cerebro a detenerse, aplicar la nueva información y detenerse inconscientemente en ella. En cambio, cuando niño tiene acceso rápido y fácil a la información las dificultades deseables se evaporan. La información tan fácilmente adquirida también se pierde fácilmente, y la información perdida durante la tarea de esa noche equivale a un conocimiento perdido a lo largo del tiempo.
¿Cuál es la fuente de la información?
A algunos niños les cuesta comprender que su asistente inteligente no es la fuente de la información que comparte. A pesar de que tiene una voz humana, en realidad no sabe nada: sólo transmite información de sitios web como Wikipedia o Yelp. A veces, los estudiantes preguntan cómo citar información de un altavoz inteligente. Pero, así como no citamos a nuestras computadoras sino a la fuente original que nos muestra, tampoco citamos a un altavoz inteligente.
Cuando los padres escuchan que los niños piden información a un altavoz inteligente, entonces, deben desafiarlos a que identifiquen la fuente. ¿Es confiable o académicamente aceptable? Muchas escuelas no permiten que los estudiantes usen Wikipedia o Spark Notes. Eso permite que los estudiantes conozcan la fuente de información. No verificarlas significa correr el riesgo de violar los estándares académicos de la escuela.
¿Cuándo puede ayudar?
El asistente digital para el hogar puede ser una herramienta útil para hacer la tarea en algunas situaciones, si se usa correctamente. La función del temporizador es rápida y fácil y puede ayudar a que los niños cansados se mantengan concentrados y terminen sus encargos. O se lo puede usar para reproducir música de fondo mientras el niño estudia.
También puede ser útil para verificar las respuestas una vez que los alumnos hayan completado la tarea. El refuerzo adicional de hacer el trabajo, preguntar al altavoz conectado a internet y luego escuchar la respuesta beneficiaría a cualquier niño.
Y está bien usar un altavoz inteligente para obtener información ocasional, porque hacer una pregunta no es tan simple como parece. Los dispositivos tienen ventanas de comprensión programadas, lo cual significa que es importante el modo en que se formulan las preguntas. Importa, por ejemplo, que se elijan las palabras clave adecuadas. Esto puede animar al niño a pensar de diferentes maneras acerca de la información que busca, lo cual es excelente para aprender.
