El rápido ascenso de DeepSeek, una startup china especializada en inteligencia artificial, ha captado la atención mundial gracias a su chatbot gratuito y de código abierto.
Sin embargo, este éxito también ha despertado serias preocupaciones sobre la privacidad de los datos, la censura y las vulnerabilidades en ciberseguridad, trazando paralelismos con la controversia que rodea a TikTok.
Un ascenso que genera inquietudes
Al igual que la popular aplicación de videos cortos, DeepSeek ha alcanzado una expansión global en tiempo récord. Esta rápida adopción ha encendido alarmas sobre la seguridad de los datos recopilados por la compañía y la influencia potencial del gobierno chino en su gestión.
Ambas plataformas han sido objeto de críticas debido a su capacidad para recolectar grandes volúmenes de datos de usuarios, lo que plantea interrogantes sobre el uso, la protección y el posible acceso gubernamental a esa información. Algunos expertos advierten que DeepSeek podría representar una «evolución mejorada» de las tácticas empleadas por TikTok para recopilar datos con fines estratégicos.
Riesgos de código abierto y censura
Aunque el modelo de código abierto de DeepSeek fomenta la innovación, también incrementa los riesgos de usos maliciosos, como la desinformación o la manipulación de la opinión pública. Además, se ha señalado que la herramienta evita responder preguntas sobre temas sensibles para el gobierno chino, como la situación de los uigures o la soberanía de Taiwán, reforzando la narrativa oficial del país.
Vulnerabilidades de seguridad
En diciembre de 2024, un fallo en la plataforma permitió a ciberatacantes tomar control de cuentas de usuario, exponiendo una seria debilidad en su infraestructura de seguridad. Este incidente, sumado a la proliferación de modelos clonados, aumenta los riesgos de fraude, suplantación de identidad y uso indebido de la tecnología.
La sombra de la geopolítica
DeepSeek ha logrado avances significativos en el desarrollo de modelos de lenguaje de gran tamaño (LLM), rivalizando con gigantes como OpenAI y Google. Fundada en 2023 por Liang Wenfeng, la startup ha sorprendido al mundo con su modelo DeepSeek-R1, que destaca en matemáticas, codificación y razonamiento natural. Sin embargo, el bajo costo del entrenamiento de su modelo V3 ha generado sospechas sobre una posible elusión de restricciones de exportación impuestas por Estados Unidos.
Mientras el gobierno chino regula el desarrollo de inteligencia artificial bajo estrictas políticas de seguridad nacional, en Estados Unidos se discute limitar el acceso a tecnologías de IA de código abierto por su potencial para difundir desinformación y comprometer la seguridad global.
Juan Ríos
