En una época de inmediatez casi dogmática, nada más frustrante que una computadora que tarda en arrancar o que abre los programas con la lentitud de un bostezo. En esta nota, cómo optimizar el rendimiento de una PC invirtiendo 15 mil pesos.
No importa si se trata de una máquina con patente nueva o una que lleva años de rodaje. Sin realizar demasiados ajustes ni recambios, es posible mejorar hasta un 50% su performance con dos piezas de hardware: disco y memoria.
Si el equipo supera los 8 años, habrá que recurrir al kit completo de restauración. Esto incluye un disco de estado sólido (SSD) de 480 GB que cuesta 8 mil pesos, un módulo de memoria RAM de 8 GB DDR4 3200 que está 7 mil pesos, más un software gratuito de limpieza automática.
Y si bien ubicar estas tarjetas en su lugar no es muy complejo y abundan los tutorial, si uno tiene que recurrir a un técnico, deberá desembolsar unos 5 mil pesos en concepto de mano de obra.
Discos de estado sólido
A nivel estructural, el SSD es una revolución tecnológica. Ya que inicia el sistema operativo Windows en menos de la mitad de tiempo que un disco rígido (HDD) y triplicaba sus velocidades de escritura y lectura de datos.
La gran diferencia es que, mientras los HDD utilizan partes mecánicas, las SSD almacenan los archivos en microchips con memorias flash. Por eso, muchos los consideran como una evolución de los clásicos USB.
Elegir el disco correcto requiere paciencia, ya que hay varios zócalos y velocidades que no son compatibles con la máquina. Lo que implica que no habrá lugar donde encastrarlo.
Entre las marcas más confiables aparecen Kingston, Gigabyte, Westerm Digital y Seagate.
En cuanto a capacidad, en el nivel de entrada están los de 240GB, son 10 veces más veloces que un HDD, cuestan unos 4.500 pesos. Los intermedios, de 480 GB, están 8 mil pesos. Los más avanzados, de 1TB, rondan los 17 mil pesos.
Marcelo Bellucci