Los policías Laura Pagani y Diego Carrizo protagonizaron este fin de semana un heroico rescate en el partido de San Miguel, en apenas 93 segundos, de una beba de 15 meses que se estaba ahogando.
El hecho ocurrió el domingo por la mañana pero las imágenes se conocieron recién este martes: la cámara del patrullero captó cómo la policía Pagani, que es agente de la Bonaerense pero hace adicionales con la policía municipal, realizó maniobras de RCP (resucitación cardio pulmonar) y en menos de dos minutos logró que volviera a respirar.
“La reacción fue inmediata. Escuchamos gritos y la reacción siempre es frenar y ver qué pasa”, contó esta mañana el policía municipal Carrizo. En ese momento, en la esquina de la avenida Balbín y Sarmiento, vieron a una mujer con su beba en brazos, que había convulsionado, estaba desvanecida y casi no respiraba.
“Él bajó del móvil, que encima seguía andando. Clavé el freno de mano y lo veo que viene corriendo con la nena. Le realizamos RCP, él avisó por radio que se abra un cordón sanitario y que estén atentos en el hospital para que sea asistida. En la trayectoria tratamos de reanimarla y de hacer todo lo posible”, relató su compañera, encargada de las maniobras de reanimación.
Y siguió: “Más allá del profesionalismo es un acto humano, me olvidé que era policía. Le pedía por favor a Dios porque tenía que hacerlo. Me puse en los zapatos de la madre aunque no soy madre. Fue un momento inexplicable”.
Lo que sigue se ve en el video. La policía logró que la chiquita reaccionara antes de llegar al hospital y, luego, la beba fue atendida por los médicos de guardia del centro de salud, donde ingresó con dificultad respiratoria y pudieron estabilizarla. Le dieron el alta la noche de ese mismo domingo.
Un móvil de la Policía Municipal de San Miguel socorrió a una mujer y su hija de un año y tres meses, que se había ahogado y no respiraba.
“Cuando vimos el video nos largamos a llorar. Fueron 2 minutos eternos. Acá el compañero manejó como nunca. Saber que la nena estaba estable y que respiraba”, agregó Laura. “Por dentro decía ‘hay que salvarla, no se puede ir’. Hasta que la vi que abría los ojos y tomaba color. Fue un momento que no voy a olvidar en la vida”.
“Son entre 2 y 5 minutos de Balvín al Hospital Larcade, aproximadamente 12 cuadras y se me hicieron eternas. El tránsito, la gente. Lo importante es que yo informo en la radio y ella inicia el cordón sanitario y avisa al hospital. Esto agiliza todo”, continuó Diego, que sigue formándose en la conducción segura de los móviles en caso de emergencias.
Finalmente, cuando los médicos dejaron a la nena en observación y pudieron estar tranquilos, Laura contó que se acercó a la madre y que se abrazaron: “Le agradecí a la madre por haber confiado en nosotros porque nos la entregó. Cuando vi a la nena sentada en la camilla también la abracé y la besé”.
En Córdoba
Este lunes también se conoció un audio dramático de cómo una operadora de la Policía de Córdoba asistió a una mamá porque su bebé de un año se estaba ahogando. La desesperante situación ocurrió durante las últimas horas en las inmediaciones al barrio Aeronáutico de la capital cordobesa.
Un niño dejó de respirar mientras paseaba con sus padres y su vida estuvo en riesgo. Ante esta situación, su madre llamó inmediatamente a la Policía local para pedir asistencia urgente y recibió la oportuna asistencia de una operadora, quien además de ser miembro de la fuerza es paramédica, y brindó los consejos necesarios para estimular al pequeño hasta la llegada de la ambulancia.
“¡Hola, por favor, estoy acá en la ruta, se me está muriendo mi bebé, necesito ayuda, por favor!”, exclamó la mujer. Del otro lado la atendió la sargento Cristina Ramírez. “Mamá, mamá, necesito que te tranquilices, ya va la ambulancia para allá pero necesito que te tranquilices para que salvemos a tu bebé”, le pidió la oficial.
“Yo lo traía en upa, empecé a mirar para atrás, lo miré y se me estaba ahogando”, contó la madre del niño. Gracias a la vital ayuda de la uniformada, la mujer posicionó al bebé boca abajo y el niño comenzó a llorar y respirar nuevamente. En ese preciso momento, arribó el móvil para auxiliar a la familia en el lugar de los hechos.