La ley argentina permite a las personas tener una tranquilidad clave: saber que no perderán la vivienda ante un problema económico grave.
Acceder a este «blindaje legal» es sencillo, y sin embargo mucha gente aún no hizo el trámite necesario.
Ahora, quienes tienen eso pendiente podrán aprovechar una oportunidad de asesorarse gratis con un escribano sobre el tema y realizar la gestión de inmediato sin pagar un peso. Es decir, con todos los aranceles y gastos bonificados.
Una vez por año, se realiza en todo el país una Jornada Federal de Asesoramiento Gratuito Notarial comunitario, en la que los escribanos se ponen a disposición de cualquier vecino para asesorarlos ad honorem sobre asuntos legales clave. Este año será el próximo sábado, 20 de noviembre.
En territorio porteño, el Colegio de Escribanos de la Ciudad de Buenos Aires ya anunció que se sumará a esta iniciativa con una nueva edición de su tradicional campaña de servicio público «Cuidá lo Tuyo», y esta vez con un foco muy definido en ayudar a los vecinos a que puedan inscribir sus viviendas en el régimen que las protege contra ejecuciones.
Se trata del sistema que por muchos años se conoció como «bien de familia». Y que desde 2015 -con el nuevo Código Civil y Comercial (CCC)- se convirtió en el Régimen de Protección de la Vivienda, más amplio que el anterior (ahora, por ejemplo, también puede aprovecharlo gente soltera, divorciada o viuda).
Los escribanos porteños atenderán sin cargo el sábado 20 en la sede de su Colegio, ubicada en avenida Callao al 1540, a metros de avenida Las Heras. Esta convocatoria es sólo para personas residentes en la Ciudad de Buenos Aires.
El evento tendrá lugar entre las 10 y las 13. Y, por protocolos de prevención del coronavirus, los interesados deberán inscribirse previamente. Para pedir turno hay que ingresar a este sitio web.
¿Qué se podrá hacer? Por un lado, consultar y gestionar sin cargo la protección de la vivienda. Pero también, recibir asesoramiento en todos los temas en los que intervienen los escribanos, como permisos de viaje para menores, donaciones, testamentos y divisiones de bienes en la pareja, entre otros.
«Realizar las protecciones de la vivienda familiar es un hecho fundamental para asegurar el techo y dar una instancia más de seguridad a la sociedad», destacó Jorge de Bártolo, el presidente del Colegio, para invitar a la gente a sumarse.
¿Por qué es importante que la casa propia esté inscripta como «bien de familia»?
Desde el Colegio de Escribanos porteño explican que el régimen de protección de la vivienda sirve fundamentalmente para que la casa propia quede a salvo de ser rematada por deudas.
O, dicho de otro modo, que los acreedores -por ejemplo, un banco- no puedan en un futuro cobrarse lo que se les deba con la venta de la propiedad al mejor postor.
¿El régimen protege contra todas las deudas?
No, hay excepciones. El sistema, regulado por los artículos 244 a 249 del CCC, permite proteger una vivienda propia de ser ejecutada por deudas futuras. Es decir, ponerla a salvo de las que se acumulen a partir de la inscripción.
Por obligaciones que ya se tenían, en cambio, la casa sí se podrá perder. Y también por ciertas deudas posteriores que fueron exceptuadas: las de expensas o el ABL, cuotas alimentarias, préstamos hipotecarios o créditos que se usaron para mejorar la casa.
¿Qué propiedades pueden tener la protección?
Una casa, un departamento y cualquier otro inmueble que se esté usando como vivienda puede entrar al régimen hasta por el 100% de su valor, junto con sus cocheras y bauleras.
Lo que no puede hacer una misma persona es tener más de una propiedad con el «blindaje legal»: si alguien es el único dueño de dos o más casas, puede elegir a cuál proteger.
Desde luego, quien tenga la vivienda asegurada por este régimen no podrá ponerla como garantía de un contrato de alquiler o de un crédito. Además, si algún día hay que venderla será necesario «desafectarla», ya sea antes o durante la operación.
¿Quiénes pueden pedir la protección de su vivienda?
Cualquier persona puede inscribir una vivienda que le pertenece, incluso si está hipotecada. Y en los casos de propiedades con más de un dueño, deben pedir la protección todos los cotitulares de manera conjunta.
Si hay más de un titular, no es requisito sean parientes: una casa comprada por ejemplo por tres amigos se puede inscribir perfectamente, siempre y cuando todos estén de acuerdo y al menos uno lo esté habitando.
Por otra parte, los propietarios que pidan entrar al régimen tienen dos opciones: hacerlo sólo en beneficio de sí mismos o designar a otras personas -llamadas «beneficiarios»- para que también estén amparadas.
¿A quiénes se puede designar como beneficiarios?
Además del propietario, pueden ser beneficiarios su cónyuge, sus ascendientes (padre, madre, abuelos), sus descendientes (hijos, nietos) y personas convivientes.
También, a falta de ellos, se puede beneficiar a parientes como hermanos o tíos (los llamados «colaterales del tercer grado») que convivan con quien tiene el inmueble a su nombre.
Lo que en cualquier caso exige el CCC es que el titular o al menos un beneficiario viva en la propiedad. Si no es así, la protección se pierde.
Si tengo una vivienda inscripta y me mudo a otra, ¿pierdo la protección adquirida?
No. Esa fue otra de las grandes novedades que trajo la reforma de 2015. Antes, al mudarse, había que cancelar el «bien de familia» y constituir uno nuevo, perdiendo así la protección frente a las deudas respecto de las cuales ya se tenía el amparo.
Con el nuevo régimen, en cambio, al vender una propiedad protegida y comprar otra vivienda es posible traspasar la protección que se tenía.
¿Cómo se puede hacer el trámite para entrar al régimen de protección de la vivienda?
La inscripción puede hacerse por dos vías, a elección de quien la solicita:
-En sede administrativa. Se hace gratuitamente en el Registro de la Propiedad Inmueble de la jurisdicción en la que está anotado el inmueble. En Capital, hay que sacar turno en esta web para ir un día hábil de 8 a 13 a una oficina con todos los documentos que se piden aquí.
-En sede notarial. Esta opción implica acudir a un escribano para que asesore y confeccione, ya sea en su estudio o en otro lugar, y con todas las partes presentes, una escritura. Es decir, un documento público que se inscribe en el Registro y en el que constará la voluntad del propietario de proteger la vivienda, los beneficiarios y todo lo que pide la ley.
¿Cuáles son normalmente los costos de hacer la inscripción con un escribano?
Habitualmente, al elegir esta opción, que permite recibir un asesoramiento personalizado y llevarse una escritura (en vez de un acta administrativa), habría que abonar los honorarios del escribano, que son como máximo del 1% del valor fiscal de la propiedad. También se suman gastos por fojas y derecho de escritura que rondan los $ 2.000.
Esos son los costos que podrán ahorrarse quienes pidan un turno en la jornada «Cuidá lo Tuyo». En cualquier caso, una ventaja para considerar es que todos los trámites y actos necesarios para ingresar al régimen están exentos de impuestos y tasas.
¿Qué documentos hay que llevar para hacer la inscripción con los escribanos?
El propietario o todos los cotitulares deberán presentar originales y fotocopias de:
El DNI de cada uno de los dueños.
Constancia del estado civil (esto sólo en caso de que haya cambiado respecto del que figura en el título de dominio).
Quien pida entrar al régimen deberá entregar la escritura de la propiedad y podrá recuperarla una vez que esté terminado el trámite, que demora habitualmente entre uno y dos meses.
¿Cómo aprovechar la jornada de asesoramiento gratuito en la Provincia de Buenos Aires?
El mismo sábado 20 los notarios bonaerenses, nucleados en el Colegio de Escribanos de la Provincia, también estarán dando asesoramiento gratuito sobre diversos temas en los que intervienen.
Según anunciaron, habrá atención ad honorem en Lomas de Zamora, Morón, San Isidro, San Fernando, Ingeniero Maschwitz, Caseros, La Plata, Villa Gesell, Mar del Plata, Necochea, Mercedes, Nueve de Julio, Bragado, Pergamino y Tandil. El detalle de las direcciones y horarios se puede consultar en este sitio web.
MG