Buenos Aires, martes 6 de noviembre de 2018 – La hepatitis C es una condición sumamente frecuente, que afecta a cerca de 400 mil argentinos, y es una enfermedad curable en más del 98% de los casos.
El problema más grave es que 7 de cada 10 portadores del virus no saben que lo tienen. Ante este panorama, el involucramiento de distintas especialidades de la Medicina en el tema despierta entusiasmo y se propone como una posible estrategia para llegar más lejos mejorando el diagnóstico.
La Asociación Médica del Hospital de Clínicas ‘José de San Martín’ y la División de Gastroenterología de la misma institución organizaron el Simposio Universitario de Actualización en Hepatología y Gastroenterología, evento que tuvo lugar el 1 y 2 de noviembre en la sede de la Facultad de Medicina de la UBA. Entre los temas principales de la jornada, se destacó el abordaje de la hepatitis C e integraban el auditorio médicos clínicos, hepatólogos, gastroenterólogos, infectólogos, diabetólogos, reumatólogos, hematólogos y nutricionistas, entre otras especialidades.
“Tenemos una deuda enorme con respecto al diagnóstico de enfermedad, por lo que una posible solución es su abordaje interdisciplinario. Por eso es importante que muchas otras especialidades de la Medicina conozcan esta enfermedad tan frecuente, silenciosa y dañina. Si el diabetólogo, el reumatólogo o el hematólogo detectan a un portador de este virus, el paso siguiente será su derivación al hepatólogo, que es quien mejor seguirá al paciente en su proceso hacia la cura, pero es muy importante que entre todos trabajemos para encontrar a los pacientes”, sostuvo el Dr. Esteban González Ballerga, médico hepatólogo, Jefe del consultorio externo de Gastroenterología del Hospital de Clínicas ‘José de San Martín’.
Son muchas las enfermedades en las que es sumamente importante su detección a tiempo. “Uno puede mencionar por ejemplo al cáncer de colon o la celiaquía, entre muchas otras. Sin embargo, el caso de esta enfermedad hepática es alarmante por lo paradójico, dado que es una enfermedad que se cura y cientos de miles de argentinos no saben que la tienen”, describió el Dr. González Ballerga.
Toda persona mayor de 50 años, crea o no crea haber estado expuesto a los que se consideran factores de riesgo, debería realizarse al menos una vez en la vida el test de la hepatitis C, que es un sencillo análisis de sangre, que puede agregarse a los chequeos de rutina que le solicita su médico de cabecera.
Este virus se transmite por contacto con sangre contaminada. Quizás sea la contrajo en forma involuntaria por una transfusión sanguínea, por una mala esterilización de instrumental médico en procedimientos quirúrgicos o por compartir elementos de higiene personal como cepillos de dientes o afeitadoras. Los instrumentos para la realización de tatuajes o piercings pueden transmitir el virus si no se toman las medidas necesarias, al igual que determinados tratamientos de belleza, entre otras vías.
La gran mayoría de las veces, los pacientes se sorprenden ante el diagnóstico y llegan a él en forma casual, al intentar donar sangre, por ejemplo. Es necesario ganar tiempo porque el virus va dañando progresivamente al hígado, pudiendo llegar a producir cirrosis o cáncer hepático y requerir trasplante. Por lo tanto, cualquier profesional de la salud puede sugerirle al paciente realizarse el test, más allá de que éste presumiblemente haya incurrido o no en alguna práctica de riesgo.
Respecto de la realización de una capacitación como la que tuvo lugar en la Facultad de Medicina de la UBA, el Dr. González Ballerga sostuvo que hoy todas las especialidades enfrentan un gran desafío para estar al día con todos los avances de su área de conocimiento y a la vez intentar desarrollar una mirada integral, holística del paciente y de su condición.
“Es tanto lo que cada médico debe leer para estar actualizado en su especialidad, que no alcanza el tiempo para lograrlo. En ese sentido, eventos como éste nos ayudan a compartir conocimiento en forma simplificada, de la mano de referentes. Son temas con los que se convive a diario como el hígado graso, la hepatitis C o la cirrosis. Son algunos de los grandes problemas que tiene hoy la salud pública”, agregó el especialista.
La agenda de la actividad para profesionales de la salud incluyó también otros temas como hígado graso, cirrosis, enfermedad inflamatoria intestinal, celiaquía, microbiota y trasplante de material fecal.