Se enviaron los primeros lotes al instituto ruso Gamaleya Center para su evaluación y aprobación.
El laboratorio Richmond informó hoy ante la Comisión Nacionales de Valores (CNV) que está finalizando la elaboración de los primeros lotes de prueba de la vacuna Sputnik V contra el coronavirus. “Estos lotes están siendo enviados al Gamaleya Center [el instituto que desarrolló la vacuna rusa] para su evaluación, mientras que otros ensayos son realizados en paralelo en nuestros laboratorios”, dice la nota.
Según ampliaron luego en un comunicado, está previsto que la producción a gran escala de la Sputnik V en el país comience en junio. La Argentina fue el primer país de América Latina en registrar oficialmente la vacuna en su territorio. El registro se llevó a cabo a través de una autorización de uso de emergencia y la vacunación comenzó el 29 de diciembre de 2020.
“La vacuna producida en la Argentina podrá ser exportada a otros países de América Central y América Latina”, señalaron en un comunicado. En el día, el precio de las acciones de la empresa subió más de 23%.
Actualmente, la Sputnik V está registrada en 60 países, que suman una población total de 3000 millones de personas. La efectividad de la vacuna es del 97,6%, según el resultado del análisis de datos sobre la incidencia del coronavirus entre los rusos vacunados con ambos componentes en el período comprendido entre el 5 de diciembre de 2020 y el 31 de marzo de 2021.
En febrero pasado, el laboratorio que preside Marcelo Figueiras anunció que firmaba un memorándum de entendimiento entre Management Company of Russian Direct Investment Fund -Fondo Ruso de Inversión Directa (RDIF)-, quien representa a Gamaleya National Research Institute of Epidemiology and Microbiology, para fomentar la cooperación entre las partes y así poder fabricar la vacuna en la Argentina.
“Nuestro país es el primero de Latinoamérica en comenzar el proceso de transferencia tecnológica de la vacuna Sputnik V, todo lo cual fue posible gracias a la colaboración de RDIF y de sus socios estratégicos”, dice el comunicado.
Y finaliza la nota: “De no mediar dificultades, a la mayor brevedad posible, se comenzaría con la etapa de producción de la Sputnik V en la República Argentina”.
“Laboratorios Richmond se enorgullece del apoyo de RDIF, que confió en nuestra base científica y tecnológica para producir la vacuna Sputnik V en la Argentina. Nuestra empresa hará todo lo posible para garantizar que la vacuna esté disponible lo antes posible para la Argentina y para toda la región de América Latina”, dijo Figueiras.
Kirill Dmitriev, director ejecutivo RDIF, declaró: “La Argentina fue la primera en América Latina en aprobar el uso de la vacuna Sputnik V y comenzar a vacunar a la población. Hoy nos complace anunciar que la Argentina también se ha convertido en el primer estado de la región en iniciar la producción de Sputnik V gracias a la asociación entre RDIF y Laboratorios Richmond. Sputnik V está aprobada en más de 10 países de América Latina y Centroamérica, y la producción en la Argentina permitirá realizar las entregas a nuestros otros socios”.
La semana pasada, la empresa anunció que creaba el fideicomiso financiero llamado “Proyecto Vida” (Vacuna de Inmunización para el Desarrollo Argentino) para construir una planta en Pilar, donde se produciría en un año la vacuna Sputnik V. El laboratorio todavía busca recaudar US$70 millones.
“Se hizo un gran trabajo y en tiempo récord para lanzar el fideicomiso Proyecto Vida. Estamos convocando al mercado de capitales para construir esta planta que permitirá producir las vacunas para paliar esta pandemia y sus mutaciones. Es el camino más eficiente, eficaz y sustentable, ya que nos fortalece en autonomía y capacidad de reacción frente al virus”, había dicho Marcelo Figueiras, presidente de Richmond, durante la presentación vía Zoom.
Según explicó, firmaron un convenio con el fondo que representa al Instituto Gamaleya para producir la Sputnik V, pero el proyecto incluirá la fabricación de productos de biotecnología, como anticuerpos monoclonales, y también puede ser la base de producción para otras compañías.
“Estamos convencidos de que un mayor desarrollo del país permitirá no depender solamente de los países centrales frente a situaciones como la actual. Tiene que haber una industria fuerte con muchos jugadores para asistir también a otros mercados y, a este efecto, el mercado de capitales local debe jugar un rol fundamental”, señaló.
LA NACION