Esto se debe a las diferencias en sus fórmulas e indicaciones de aplicación, lo que puede comprometer tanto la protección solar como la efectividad del repelente.
Principales riesgos
Según el informe, aplicar ambos productos al mismo tiempo puede:
Reducir la eficacia del factor de protección solar.
Aumentar la irritación y toxicidad en la piel debido a la absorción del principio activo del repelente.
Además, algunos ingredientes presentes en los repelentes podrían interferir con la acción de los protectores solares, disminuyendo su efectividad frente a la radiación UV.
Recomendaciones de uso
Para garantizar la seguridad y eficacia de ambos productos, ANMAT sugiere:
Aplicar primero el protector solar de manera generosa y uniforme.
Usar un producto con un SPF de al menos 30.
Esperar entre 20 y 30 minutos para su absorción antes de usar el repelente.
Aplicar el repelente de insectos aprobado por ANMAT después del protector solar.
Reaplicar el protector solar según sea necesario, especialmente después de sudar, nadar o tomar un baño.
Datos adicionales
Los mosquitos Aedes aegypti, principales transmisores de enfermedades como el dengue, suelen atacar durante las primeras horas de la mañana y el atardecer, horarios que no coinciden con la mayor exposición solar, lo que reduce la necesidad de aplicar ambos productos simultáneamente.
En Argentina, tanto los protectores solares como los repelentes de insectos están regulados como «productos para la salud» por la ANMAT, lo que garantiza su calidad y seguridad cuando se utilizan de manera adecuada.
