La tercera etapa de esta mega intervención en beneficio de los barrios Constitución, Martín Raúl Galán, Martijena, Belgrano, San Cayetano, 9 de Julio, 11 de Octubre, 25 de Mayo, Carolina, San Martín, Sarmiento, 23 de agosto, Florida, Alto La Torre y El Remate, junto a zonas cercanas, se llevará a cabo con personal, maquinaria y financiamiento de la empresa estatal y consistirá en la realización de dos empalmes de un acueducto principal de 250 mm.
Puntualmente, las vinculaciones se harán primero sobre un ducto de 400 mm sobre ruta 66, que alimenta a una cisterna principal en la ciudad siderúrgica, y el segundo sobre otro nexo de 160 mm que abastece a localidades aledañas, sobre ruta 1.
Toda esta planificación, llevada a cabo por el ingeniero Mauricio de la Vía, jefe del operativo, responde a la necesidad de mejorar el servicio en sectores que tienen como fuente de agua potable el sistema ubicado en Río Blanco, donde el paso del tiempo natural fue debilitándolo debido a la disminución del caudal que este tenía.
Trabajos previos a la etapa final de la obra
Previamente a este punto clave del importante proyecto, se instaló un flamante nexo de PVC de 160 mm de diámetro en el sector anteriormente mencionado de Río Blanco, siendo un paso fundamental para continuar con las distintas labores en este martes. La función del nuevo tramo de red colocado en esta primera etapa es incrementar el ingreso de agua a la cisterna ubicada en la zona y así disponer de mayor caudal para reparto. Posteriormente, la empresa estatal ejecutó una vinculación de este nuevo acueducto para unirlo a la planta potabilizadora de la localidad, aumentando con esta segunda etapa del proyecto la capacidad de tratamiento del líquido elemento gracias a su mejor alimentación.
Los trabajos preliminares para la parte final ya iniciaron con distintas verificaciones que permitirán un accionar óptimo este martes, cuando se tiene previsto iniciar la etapa fuerte del plan de obras. Entre estas tareas se destaca la confirmación de las piezas especiales a usarse, la operatividad de válvulas y desagües, limpieza de las zonas a intervenir y fundamentalmente el llenado de las cisternas a su nivel máximo para afectar lo menos posible el servicio de distribución.
En el proyecto se especifica que se trabajará en los dos empalmes a realizarse al mismo tiempo, una vez que con anterioridad las maniobras de válvulas y desagotes estén completas, teniendo una cuadrilla de personal especializado en los sectores de la ruta 66 y ruta 1. A su vez se actuará bajo la constante presencia del departamento de Seguridad e Higiene de la empresa estatal debido a que estas obras de reingeniería significan un cierto nivel de riesgo que debe ser contrarrestado al máximo. El acueducto de 400 mm será el foco más complejo de intervenir debido a que requerirá más labores para su correcta finalización.
Se comenzará con los cortes con amoladora en los dos puntos donde se instalarán las juntas y el ramal de derivación, junto al montaje y ajuste de piezas metálicas y bulones. Habiendo finalizado otras acciones más como colocación de un adaptador de brida y tramos de red para alcanzar la válvula esclusa existente, se iniciará el proceso de normalización de la distribución del servicio completo para Palpalá y localidades aledañas.
