Proyecto de Ley Hojarasca: Claves de la iniciativa para eliminar 70 leyes obsoletas

El Gobierno presentó al Congreso el proyecto de Ley Hojarasca, cuyo objetivo es derogar 70 leyes sancionadas a lo largo del siglo XX que se consideran "obsoletas e innecesarias"
Congreso de la Nación Argentina

La iniciativa busca reducir costos para los contribuyentes y eliminar normativas que afectan las libertades individuales y el desarrollo del país.

Objetivo del proyecto

El proyecto, impulsado por el Ministerio de Desregulación y Transformación del Estado, liderado por Federico Sturzenegger, plantea que la Constitución Nacional ya establece las libertades individuales y, por lo tanto, no se necesitan leyes específicas que regulen actividades permitidas. Estas normativas, según el Gobierno, han creado obstáculos innecesarios para los ciudadanos y han generado gastos por la creación de organismos que ya no cumplen una función relevante, como la Federación Argentina de Municipios.

Impacto en la seguridad jurídica y las libertades individuales

Según el texto oficial, la Ley Hojarasca pretende fortalecer la seguridad jurídica eliminando leyes que, en lugar de proteger los derechos de los ciudadanos, se han convertido en barreras para su desarrollo. «El exceso de regulaciones impide que los individuos ejerzan sus derechos y limita la actividad económica», señalaron desde la cartera de Sturzenegger. La propuesta busca restablecer el principio constitucional de que todo lo que no está prohibido expresamente está permitido, promoviendo la máxima libertad y eliminando el control excesivo del Estado.

Leyes a derogar: Un legado de sobrerregulación

El proyecto critica que muchas de las leyes en cuestión fueron creadas durante gobiernos militares y democráticos con visiones intervencionistas, imponiendo regulaciones que limitaban las libertades individuales y la actividad económica. Entre los gobiernos responsables de estas normativas se encuentran los de Agustín Lanusse, Jorge Rafael Videla, Arturo Frondizi y Raúl Alfonsín. También menciona la existencia de leyes creadas para perseguir opositores políticos o controlar a la ciudadanía, muchas de las cuales aún permanecen vigentes.

Claves del proceso de derogación

El Ejecutivo detalló seis criterios fundamentales para la derogación de estas leyes:

Leyes obsoletas o reemplazadas: Normas superadas por legislaciones más completas y modernas, como las relacionadas con la vacunación.

Superadas por la tecnología o el tiempo: Normas que han quedado desfasadas, como la ley que regula las emisiones de televisión a color.

Limitaciones a las libertades individuales: Leyes que permiten la intervención del Estado en actividades privadas, como la supervisión de reuniones en domicilios particulares.

Simplificación burocrática: Eliminación de organismos y regulaciones que ya no son necesarios, reduciendo la carga presupuestaria.

Instituciones inexistentes: Derogar leyes que crearon organismos que ya no existen, como el Complejo Portuario de Ultramar.

Organismos solventados por el Estado: Organismos del sector público que continuarán operando sin financiamiento estatal, como la Federación Argentina de Municipios.

Un cambio de paradigma regulatorio

La Ley Hojarasca se presenta como un paso hacia la desburocratización del Estado y la defensa de las libertades individuales. El proyecto busca eliminar la sobrerregulación y fomentar un marco jurídico más dinámico y acorde a los desafíos actuales del país, permitiendo el desarrollo económico y la adaptación a las nuevas tecnologías.

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