La asistencia fue completa, con representantes de las 23 provincias y la Ciudad de Buenos Aires en la extensa mesa del salón Eva Perón.
El Jefe de Gabinete, Nicolás Posse, ocupó el lugar principal, acompañado por el ministro del Interior, Guillermo Francos, el brazo político del Gobierno. Esta imagen positiva para la Casa Rosada llegó tras un período de confrontación y fracasos legislativos. La reunión fue una oportunidad para reiniciar las conversaciones. La mayoría de los gobernadores, aliados y negociadores, pudieron redefinir sus posiciones después de sentirse atrapados por las tensiones previas. Aunque algunos continúan siendo firmes en su oposición, los gobernadores pragmáticos, en su mayoría de partidos provinciales, están buscando un equilibrio y una colaboración constructiva con el Gobierno.
Los temas discutidos fueron los esperados: Impuesto a las Ganancias, restitución del Fondo Nacional de Incentivo Docente y del fondo compensador para el transporte, y la nueva Ley Ómnibus. Aunque no se alcanzaron acuerdos definitivos, hubo gestos de acercamiento y voluntad de negociar. Para la mayoría de los gobernadores, esto representó un avance significativo y una pausa en la confrontación con el Presidente.
Uno de los gobernadores presentes en la reunión destacó el ambiente de diálogo y la receptividad a las propuestas del Gobierno. Sin embargo, señaló que el verdadero impacto se verá con la redacción final de la nueva Ley Ómnibus.
Durante la reunión, los gobernadores hicieron un pedido unánime para que Milei cese sus ataques en las redes sociales. Francos y Posse se comprometieron a transmitir este mensaje, pero el malestar persiste.
El tema del Impuesto a las Ganancias sigue dividiendo a los gobernadores, con algunas provincias oponiéndose a su restitución. Se están explorando alternativas, como un impuesto a los altos ingresos, propuesto por algunos gobernadores.
El Gobierno está dispuesto a buscar un consenso entre los mandatarios sobre este tema sensible que afecta las finanzas provinciales. Se ha establecido una nueva dinámica de diálogo a través de dos comisiones para acelerar la búsqueda de acuerdos.
La verdadera negociación sobre el contenido de la ley aún está por comenzar, pero se espera que el proyecto sea presentado con un acuerdo previo para evitar los obstáculos legislativos pasados.
La buena sintonía en la reunión es un paso positivo, pero la verdadera prueba será cómo se desarrollan las negociaciones sobre el nuevo proyecto de ley y la cuestión de la coparticipación. Los gobernadores muestran voluntad política para reconstruir el vínculo con el Gobierno, pero mantienen reservas sobre la relación con Milei.
En resumen, los gobernadores ven la oportunidad de contribuir al éxito del proyecto, pero gran parte de ello dependerá de las acciones del Presidente.
