En lo que fue su primera participación durante la jornada inaugural de la cumbre de países miembros del G20, el presidente Mauricio Macri aseguró tener la certeza de que «este rumbo que elegimos los argentinos va a consolidarse cada vez con más fuerza de cara al futuro» y que el país «está listo para beneficiarse de las reformas estructurales» llevadas adelante durante su gestión.
El clima de euforia en la comitiva oficial arrancó tras la reunión de Macri con Christine Lagarde. Allí la jefa del FMI transmitió sin vueltas su impresión del encuentro con el presidente argentino: «Tuve una conversación muy productiva con el presidente Mauricio Macri hoy en Osaka. Reiteré el apoyo del FMI al programa económico de Argentina, que está comenzando a dar resultados y debería sentar las bases para un crecimiento sostenible», dijo.
«Permítanme hacerles algunos comentarios sobre el momento que está viviendo la Argentina. Después de un 2018 difícil, hay buenas noticias sobre el rumbo de nuestra economía», aseveró Macri durante su discurso, en el que sostuvo que “ya se están viendo signos de leve mejoría, empezando a dejar atrás la recesión y los desequilibrios que afectaron a nuestra economía durante años”.
«Este año estamos en camino de alcanzar la meta de equilibrio fiscal, lo que implica una reducción del déficit en 5 puntos del PBI en 4 años. Además, las exportaciones crecerán a dos dígitos este año por primera vez desde 2011», agregó.
Luego, a partir de esas cifras, expresó que «esto demuestra que estamos corrigiendo los desbalances acumulados durante la administración anterior, que dejaron a tantos argentinos en la pobreza y nos impidieron crecer».
«Hoy, el país está listo para beneficiarse de las reformas estructurales que impulsamos durante estos últimos tres años y medio», sostuvo Macri, quien compartió la cabecera de la mesa de la sesión plenaria junto al primer ministro de Japón, Shinzo Abe, y al príncipe heredero de Arabia Saudita, Mohammed bin Salman Abdulaziz Al Saud, por ser los gobernantes de los tres países que hoy forman parte de la troika del G20.
El mandatario argentino, que durante esta primera cita conjunta de los jefes de Estado se mostró muy próximo del presidente de los Estados Unidos, Donald Trump, expresó su agradecimiento a los demás líderes «por el voto de confianza» hacia la Argentina y consideró que «el amplio apoyo de la comunidad internacional fue crucial para que los argentinos avancemos por una senda de desarrollo integrado al mundo de una vez y para siempre».
En otro tramo de su mensaje, Macri se refirió a la situación de Venezuela y aseguró que «nuestra región enfrenta una crisis humanitaria de una magnitud sin precedentes».
El apoyo de Estados Unidos resulta crucial para Macri si se tiene en cuenta que fue el presidente norteamericano quien destrabó en gran medida el acuerdo del FMI para que le giren a la Argentina 55.000 millones de dólares en medio de la crisis cambiaria en una aprobación del border del Fondo realizada en tiempo récord.