El presidente Milei ha calificado de “dibujados” los estados contables de la AFA y se espera que hoy se firme un decreto que retire ventajas impositivas otorgadas en el gobierno de Alberto Fernández, facilitando el pago de cargas sociales a futbolistas, cuerpo médico y empleados.
La AFA, presidida por Claudio “Chiqui” Tapia, fue recientemente reelecta hasta 2028 en una asamblea que la Inspección General de Justicia (IGJ) considera nula. La medida de quitar los beneficios fiscales podría impactar gravemente en la financiación de los clubes, especialmente en aquellos con menores ingresos. Se prevé que el decreto se publique mañana en el Boletín Oficial, otorgando a los clubes un plazo de seis meses para adaptarse a la nueva normativa. Un comité, encabezado por la Jefatura de Gabinete y el Ministerio de Justicia, actuará como interlocutor con las entidades deportivas.
Milei ha declarado en una entrevista que se revisarán las situaciones irregulares en la AFA, aunque no ofreció más detalles. Esta revisión se inscribe dentro de un esfuerzo mayor del Gobierno por promover la oficialización de las Sociedades Anónimas Deportivas (SAD), un punto que ha sido judicializado.
Los balances de la AFA, al 31 de julio pasado, revelan datos preocupantes, como una pérdida de más de $13.000 millones en créditos impagos, que es casi seis veces más que en ejercicios anteriores. Además, el Gobierno destaca gastos de $61.892 millones en sueldos y cargas sociales, sin un registro de cambios significativos en la nómina. Esto contrasta con el promedio de $19.830 millones en periodos anteriores.
El informe también señala que los ingresos de la AFA, en un contexto inflacionario, son insostenibles. La AFA reportó ingresos en flujos de efectivo de $83.965 millones, lo que genera dudas sobre la veracidad de los datos presentados. En cuanto a los gastos relacionados con las selecciones nacionales, que ascienden a $39.518 millones, se menciona que no están claramente especificados y presentan costos excesivos en indumentaria y otros rubros.
Desde el Gobierno se busca criticar a Tapia por su gestión sin afectar a la selección nacional, actual campeona del mundo. Cualquier intervención podría acarrear repercusiones negativas para los clubes argentinos y permitir a Tapia acusar al Gobierno de injerencia en la AFA.
El Gobierno también está impulsando la apertura de los clubes a capitales privados mediante las SAD, lo que ha llevado a un incremento en las tensiones con Tapia. En la reciente Asamblea General de la AFA, celebrada en el predio Lionel Messi de Ezeiza, se reeligió a Tapia y se modificaron aspectos del Estatuto de la entidad, acciones que la IGJ había declarado irregulares.
Milei subrayó la importancia de esta contienda, señalando que Argentina es un semillero de talentos futbolísticos y que podría tener una liga local de mejor calidad si no fuera por la AFA. El presidente insiste en la necesidad de permitir que aquellos que deseen cambiar el modelo societario puedan hacerlo, reiterando su enfoque en las SAD, a las que Tapia se opone firmemente.