El gobierno de Alberto Fernández suspendió el diálogo con la Mesa de Enlace, al menos hasta el final de las 96 horas de cese de comercialización y faena dispuesto hoy por las entidades del agro en respuesta al aumento de tres puntos en los derechos de exportación de la soja, anunciadas por la Casa Rosada la semana pasada.
«Ya se dialogó suficiente. Esperaremos a que termine la medida de fuerza, que claramente es política», afirmaron a LA NACION desde el Gobierno. Cerca del ministro de Agricultura, Luis Basterra, confirmaron que el funcionario se mantendrá en silencio durante el primer día del paro agropecuario.
A pesar de intentar bajar los decibeles de la discusión, en la Casa Rosada creen que hay un «componente político» en la medida de fuerza y señalan a referentes de Juntos por el Cambio de estar detrás de la protesta . «No es compartida por muchos sectores», adviertieron fuentes oficiales sobre posibles divisiones internas entre los productores.
«En este momento se requiere sensatez y prudencia. Hay un gran componente político-ideológico en esta decisión, y comprendo que algunos puedan no creerle al Gobierno, pero estamos en un momento de emergencia absoluta. Hay que generar una relación constructiva con el sector agropecuario», afirmó el secretario de Relaciones Parlamentarias, Fernando «Chino» Navarro, en declaraciones radiales.
Navarro, que aludió a «dirigentes ligados al campo y al macrismo», también habló de «serenar las aguas». Se diferenció de ese modo de las duras críticas al campo que manifestaron el dirigente social Juan Grabois y el senador Oscar Parrilli, que contribuyeron a caldear los ánimos de muchos productores. «Hay compañeros que eligen contestar, me parece que no es el camino más allá de que entiendo su bronca», dijo Navarro en referencia a esos dirigentes kirchneristas. «El paro de 2008 tenía el respaldo de vecinos, hoy es un paro que no puede llamarse mayoritario, la Federación Agraria tuvo que dar libertad de acción porque no todos están de acuerdo», agregó Navarro al llegar hoy a la Casa Rosada. Y agregó:»Cuatro días de paro es exagerado».
En el Gobierno apuntan a algunos dirigentes. Luis Miguel Etchevehere , exministro de Agro del gobierno de Cambiemos y dirigente de la Sociedad Rural, y Jorge Chemes , exdiputado radical y hoy titular de CRA, están entre los más criticados. «Sabíamos que si había algún sector por donde el macrismo podía ingresar a algún conflicto era este, más allá de que no es una protesta masiva», afirmó otra fuente oficial.
«Esta es una protesta de los grandes sojeros, a quienes afecta el aumento de las retenciones. A los pequeños y medianos la suba no les llega», remataron desde otro despacho oficial.
Por: Jaime Rosemberg