Por Silvia Giacoppo – Senadora Nacional Cambiemos
35 años. Hemos transitado un largo camino ya en esta democracia que supimos conseguir. El más largo período democrático de nuestra historia.35 años con aciertos y errores pero con el compromiso de todos de sostenerla y sabiendo que debemos seguir consolidando cada día.
Aquel 30 de octubre de 1983 dejábamos atrás tanta oscuridad, miedo y dolor. Casi 8 años de la dictadura más cruel y sangrienta que nos tocara vivir. Y aquel 30 de octubre renacían las esperanzas de vivir en libertad. Volvíamos a votar, a elegir, a tomar decisiones sobre nuestro futuro como sociedad. El pueblo en las calles lo celebraba.
Así, entonces, el 30 de octubre del ´83 quedó, en la memoria colectiva como el día de la recuperación de la democracia en la Argentina. Pero ese día se definía algo más que cual sería del partido político que sucedería a la dictadura militar. Estaban allí, también las dudas y los miedos de saber si nuestra sociedad estaba preparada para afrontar esa transición con verdad, justicia, apego a la constitución y a los valores democráticos. La definición se planteaba entre dos opciones
Por un lado, la Unión Cívica Radical, con Raúl Alfonsín y la propuesta del juicio -dentro del marco de la ley- de todos los casos de violaciones a los derechos humanos. Por otro, el peronismo con Italo Luder que aceptaban la autoamnistía del gobierno militar.
Alfonsín, con sus discursos que incluían el preámbulo de la Constitución, logró convocar a gran parte de la sociedad, más allá de los simpatizantes de la UCR. Le hablaba a la gente, directamente. Encarnaba la paz que tanto se anhelaba y los valores democráticos que pretendíamos recuperar. Así ganó. Ganamos todos. Y fueron posibles los históricos juicios a la junta militar, que el mundo entero reconoce y que marcaron la definitiva consolidación de la democracia que hoy celebramos.
Por eso, debemos decir que en 1983 comenzaron a crearse las bases sólidas para sostener las instituciones democráticas por mucho tiempo. Todos recordamos a Alfonsín diciendo, con esa vehemencia que lo caracterizaba, que “con la democracia se come, se cura y se educa”. Era su manera de decirnos, para que todos los comprendiéramos, que si en el país no estaban garantizados esos derechos, algo se estaba haciendo mal.
Hoy, a 35 años, el mejor recuerdo es aquello que debemos tener como meta: El preámbulo de la Constitución sonando en la voz de Alfonsín… “contribuir a la unidad nacional, consolidar la paz interior, afianzar la justicia, proveer la defensa común, promover el bienestar general y asegurar los beneficios de la libertad para nosotros, para nuestra posteridad y para todos los hombres del mundo que deseen habitar el suelo argentino”.
La mejor manera de celebrar es no olvidar.