El primer robo que le adjudican a C. E. ocurrió el 26 de octubre de 2021 en el barrio de San Cristóbal. En esa fecha tenía apenas 17 años. La mayoría de edad la cumplió un mes y cuatro días después. Está acusada de ser una “viuda negra”, modalidad delictiva protagonizada por mujeres que duermen con somníferos a sus víctimas para sustraerles dinero y otros objetos de valor.
En ocho meses, según la Justicia, habría protagonizado siete atracos junto con, por lo menos, dos cómplices. Se habría alzado con un botín de casi 1.300.000 pesos, 43.100 dólares, teléfonos celulares, computadoras y televisores. A sus víctimas las conocía en la app de citas Tinder, donde se presentaba como “Sofi” o “Sofía”.
Así se desprende de la resolución del juez de Menores porteño Cristian Von Leers, que procesó a C. E. sin prisión preventiva y le trabó un embargo sobre sus bienes hasta cubrir la suma de 20.000.000 de pesos, informaron calificadas fuentes judiciales.
“La prueba hasta aquí valorada resulta suficientemente convincente como para tener por acreditados los hechos intimados a C. E. en oportunidad de su indagatoria [donde se negó a declarar], pues no advierto circunstancia alguna que me permita poner en duda la veracidad, contundencia y coincidencia en los dichos de los damnificados en torno a las circunstancias de tiempo, modo y lugar en que fueron víctimas de su accionar; ni la del personal policial que intervino tras su actuación, como tampoco de todo el material fotográfico y pericial obrante en autos, el que analizado en forma conjunta permite tener por ciertas las hipótesis aquí examinadas, lo que se corrobora además con la minuciosa investigación realizada por el personal policial interviniente y las fiscalías para entonces actuantes”, sostuvo el magistrado en su resolución, según pudo reconstruir LA NACION de fuentes al tanto del expediente.
El juez Von Leers explicó que la sospechosa usó distintas identidades en Tinder, como “Sofía”, “Sofi” y “Sofii”. “Contactaba a las víctimas por esa red y, en algunos casos, posteriormente, por WhatsApp. Tras coordinar encuentros en los domicilios de las víctimas, las sedó utilizando una sustancia somnífera que introducía en su bebida, para luego franquear el acceso a cada vivienda de un número indeterminado de personas de sexo masculino, con quienes inmovilizaba a los damnificados utilizando precintos plásticos –y en algunos casos, incluso amenazándolos y golpeándolos–, para así desapoderarlos de distintas pertenencias de valor del interior de sus domicilios, circunstancia que verificaba cada damnificado al recuperar la conciencia”, detalló.
La “viuda negra” adolescente protagonizó robos en los barrios de San Cristóbal, Villa General Mitre, Núñez, Palermo y Belgrano, según se desprende del expediente judicial.
La sospechosa fue identificada tras una tarea investigativa hecha por detectives de la División Robos y Hurtos de la Policía de la Ciudad y la Unidad Fiscal Especializada en Investigación Criminal Compleja (Ufecri), conducida por el fiscal José María Campagnoli. También interviene la Fiscalía de Menores N°6.
A mano armada
En uno de los robos, ocurrido en diciembre pasado en Núñez, diez días después de que la sospechosa cumpliera los 18 años, la víctima recuperó el conocimiento cuando sintió que le ponían algo en la cabeza. “No grites, no grites, quedate quieto o te mato”, llegó a escuchar antes de comenzar a pelear con un hombre que había ingresado en su departamento del sexto piso de un edificio situado en Manzanares al 1600.
“La víctima comenzó a pelear para defenderse, pese a que tenía la vista obstruida. Los agresores intentaban atarlo con cables, golpeándolo. De esa forma, pudo la víctima llegar hasta su cama, desde donde comenzó a gritar ‘¡ladrones, ladrones!’. Un vecino le contestó y le preguntó: ‘¿Dónde estás?’. Llegó a responder escuetamente: ‘Sexto piso’. Mientras, los ladrones intentaban atarle las manos y ahorcarlo”, se afirmó en el expediente judicial.
Cuando la víctima se pudo desatar, los delincuentes y “Sofía” ya se habían ido con el botín, unos 40.000 dólares y 400.000 pesos.
Uno de los últimos hechos que la Justicia le adjudica a la “viuda negra” ocurrió en el 1° de marzo pasado, en un departamento de Belgrano. El 24 de febrero, la víctima había conocido a una joven que se presentó como “Sofiii” en Tinder. Después de varios mensajes en la app de citas, comenzaron a chatearse por WhatsApp hasta que arreglaron una cita.
En Belgrano R
Se encontraron en la avenida Forest y La Pampa, Belgrano R. En auto fueron al departamento de la víctima. Cenaron algo que pidieron por teléfono y bebieron agua. Él no advirtió que la joven le puso un somnífero en su vaso. Apenas fueron a la cama, se quedó dormido.
“Cuando la víctima se despertó, advirtió que tenía la cara tapada y las manos atadas por la espalda. Llegó a ver a un hombre con barbijo y una gorra, al tiempo que escuchaba otras voces masculinas. Luego de unos minutos, al notar que ya no había nadie en el departamento, se incorporó y cortó con un cuchillo los precintos que aseguraban sus manos, situación en la que observó que estaba todo revuelto. Le habían robado 2000 dólares, dos teléfonos celulares, las llaves de su auto y un par de zapatillas”, afirmó el magistrado al detallar los hechos imputados a la sospechosa.
Los cómplices de “Sofi” aún no pudieron ser identificados. La sospechosa nació el 30 de noviembre de 2003 y dijo ser manicura. Vive en Barracas, en el barrio Loma Alegre, en la villa 21-24.
“C. E. integró una organización dedicada a cometer una pluralidad indeterminada de delitos, principalmente contra la propiedad. Por medio de la investigación desarrollada se puso en evidencia que la nombrada y un grupo de hombres que no pudieron ser todavía individualizados desplegaron maniobras ilícitas que habrían tenido lugar al menos desde el 26 de octubre de 2021 y hasta el 26 de abril pasado. Ello por cuanto la banda presentaría un alto grado de organización y coordinación para concretar las acciones delictivas citadas, más allá de la puntual intervención individual de cada miembro en los sucesos desplegados en esas circunstancias”, afirmó el magistrado en la resolución donde procesó a la sospechosa.
Gabriel Di Nicola