Micaela Ortega, la niña de 12 años que estuvo desaparecida poco más de un mes de su casa de la ciudad bonaerense de Bahía Blanca, apareció asesinada en la localidad de Ingeniero White, y por el crimen detuvieron a un joven prófugo que confesó el hecho, informaron hoy fuentes policiales y municipales.
Tras el hallazgo del cadáver, unos 300 vecinos de Bahía Blanca marcharon anoche para pedir Justicia por el femicidio y en contra de la violencia de género.
Emiliano Álvarez Porte, secretario de Seguridad de la mencionada localidad del sur bonaerense, confirmó a Télam que "el cuerpo estaba escondido entre unos arbustos en avanzado estado de descomposición con varios golpes" y que los investigadores aguardaban esta mañana el resultado de la autopsia para determinar las causas de la muerte.
El hallazgo del cuerpo de Micaela, quien estuvo desaparecida desde el 23 de abril último, se registró ayer por la tarde en un descampado ubicado en cercanías de la ruta nacional 3, en proximidades de General Daniel Cerri, a 8 kilómetros al sur de Bahía Blanca.
Es que los investigadores habían concretado un allanamiento en una precaria vivienda ubicada en Juana Azurduy y Canning del barrio Saladero luego que obtuvieron el dato que desde esa dirección la niña mantuvo un contacto con una persona a través de Facebook.
En ese lugar, los pesquisas encontraron algunos elementos que pertenecían a la nena, entre ellos una campera, que fueron reconocidos después por su familia.
Tras esa diligencia, el hombre que vivía allí, identificado como Jhonatan Luna (26), fue aprehendido por orden del fiscal Rodolfo de Lucía, a quien le confesó el hecho y dio detalles de donde se encontraba el cuerpo.
Con esos datos, el propio representante del Ministerio Público y el personal policial acudieron a un descampado ubicado en cercanías de la planta de TGS.
"La encontraron con las manos atadas, las piernas cruzadas, con la misma ropa con la que se había ido de su casa", precisó el secretario de Seguridad Álvarez Porte.
Según las fuentes, el detenido tenía antecedentes penales de la provincia de Río Negro, estaba con salidas transitorias y nunca había regresado al penal en General Roca.
Álvarez Porte sostuvo que "el hombre tenía un perfil de Facebook falso y se hizo pasar por una nena similar a la edad de Micaela".
Un vocero judicial aseguró a Télam que luego de contactarse con Micaela por Facebook el hombre convenció a la nena para que se fuera de su vivienda y le sugirió si quería ir a la casa de un supuesto primo que la iba a pasar a buscar.
"Luego se comprobó que la persona que iba caminando en los videos captados por las cámaras de seguridad era esta persona (Luna)", añadió.
Los pesquisas tuvieron en cuenta las imágenes captadas por una cámara de seguridad ubicada en la avenida Don Bosco, entre Brasil y La Plata, donde se vio como la niña caminaba junto con otra persona que la acompañaba y que la guiaba por la calle.
Al parecer, una vez en el lugar donde vive el hombre, Micaela intentó escapar, por lo que el agresor la agarró y la golpeó en varias parte del cuerpo hasta que murió.
Las fuentes comentaron que por el estado del cuerpo la nena habría muerto ese mismo día, es decir durante el sábado 23 de abril.
En tanto, más de 300 vecinos de Bahía Blanca marcharon anoche para pedir justicia por el crimen y contra la violencia de género.
La movilización comenzó frente a la sede de la Municipalidad, continuó en la fiscalía y terminó en las escalinatas del municipio con un minuto de silencio.
Micaela había desaparecido en la mañana del 23 de abril y a partir de la denuncia de paradero tanto sus padres, familiares y amigos como personal policial comenzaron con distintos rastrillajes.
Con el correr de las horas se sumaron integrantes de la Policía Federal y de la Prefectura Naval Argentina en el marco de los operativos.
ASESINO, DETENIDO Y CONFESO
El detenido por la muerte de la menor fue identificado como Jonathan Luna y contactó a la víctima a través de Facebook. Violó las salidas transitorias de un penal de Río Negro donde estaba arrestado y tenía pedido de captura. Se espera la autopsia del cuerpo
Nunca volvió al penal de Río Negro donde estaba detenido. Se suponía que debía hacerlo porque salió gracias a una salida transitoria. A Jonathan Luna, de 26 años, no le importó volver a violar la ley y pese al pedido de captura, se mostró y se movió libremente por la vía pública.
En esa transgresión volvió a incurrir en el delito y la muerte. Ante la presión policial, el acusado se quebró y confesó el crimen de Micaela Aldana Ortega, la menor de 12 años que había desaparecido hace más de un mes en Bahía Blanca y cuyo cuerpo fue encontrado cerca de un monte en Cerri, en Ingeniero White.
El tétrico hallazgo se produjo luego de que el detenido confesara el asesinato y guiara a la Policía hasta el monte donde había escondido el cuerpo. De los operativos participaron efectivos del área de Delitos Complejos y la Dirección Departamental de Investigación de la Policía de la Provincia, quienes reconocieron que -de otra manera- nunca la hubieran encontrado.
Es que Jonathan Luna se encargó de esconderlo en medio de un campo cercado con alambre de púa y lleno de arbustos y pastizales que dificultaban la visibilidad durante los rastrillajes. El secretario de Seguridad de Bahía Blanca, Emiliano Álvarez Porte, admitió que "hubiera sido imposible si no lo contaba". Además, confirmó que tiene antecedentes penales y que la asesinó el mismo día que la vio,
Según reveló la Policía, Luna se hacía pasar por una nena en Facebook y fue a través de esa red social que engañó y atrapó a Micaela. Las cámaras de seguridad de Bahía Blanca registraron varios momentos en los que se ve al acusado caminando junto a la víctima. La Policía aseguró que Luna dijo haberla matado el 23 de abril, el mismo día que la menor abandonó su casa tras discutir con su madre.
Fuentes del caso revelaron que en la vivienda –ubicada en un terreno sobre la Ruta Nacional 3- se encontraron pertenencias de la menor como el teléfono celular y la campera. La abogada de la familia de la víctima, Fernanda Petersen, dijo esta mañana que si bien aún no hubo autopsia, todo indica que la mató horas después de haberla secuestrado. Tampoco- afirmó- se puede determinar si la menor fue abusada sexualmente. "Lo que sí se sabe es que el detenido tenía salidas transitorias", informó.
"La superaron las redes sociales, tenía cuatro cuentas de Facebook y no las sabía manejar", aseguró su familia durante la búsqueda. Y, finalmente, las redes sociales fueron clave. El fiscal Rodolfo de Lucía ordenó el sábado a la noche allanar la casa de Ingeniero White, adonde Micaela fue llevada y asesinada.
Mónica Cid, la mamá de la nena, confesó que su hija fue "víctima de las redes sociales". "No supo manejar eso y armó una cuenta de Facebook con 600 personas desconocidas", lamentó con profundo dolor tras aclarar que tampoco tenían grandes problemas familiares con la menor.