El ataque ocurrió en el polideportivo municipal de Los Polvorines. Cuatro agentes están presos por el abuso y el restante, por no ayudarla. Fueron desafectados de la Fuerza.
Mientras algunos de los 45 policías que viven en el polideportivo municipal de Los Polvorines, en tanto dura la pandemia por coronavirus, hacían rondas por Malvinas Argentinas, unos 14 agentes que esa noche no salieron decidieron festejar el cumpleaños de uno de sus compañeros. Hubo alcohol y también música.
En ese polideportivo vive la mitad de los 90 agentes de la Policía Bonaerense que la Gobernación envió al municipio para reforzar los controles por la cuarentena. Fue en ese lugar, y en el marco de ese festejo, que una agente denunció que fue violada por cuatro de compañeros.
Según pudo saber Clarín, la joven de 21 años, y oriunda de La Plata, denunció el lunes ante el fiscal de la UFI N°14 de Delitos Sexuales de San Martín, Jorge Castagna Lavia, que cuatro compañeros la violaron el domingo 10 de mayo.
“Todos están detenidos”, explicaron las fuentes consultadas.
También fue preso un quinto agente con el que la policía que denunció el abuso mantuvo un encuentro sexual esa misma noche. Lo acusan de haberla abandonado a su suerte ante el ataque de sus compañeros: «Se fue”, dijeron las fuentes.
Será el Juzgado de Garantía N°4 quién decidirá cómo continuarán el proceso los cinco acusados: presos o en libertad.
Mientras tanto, el fiscal Castagna Lavia acusó a cuatro de los policías, de 19, 21, 22 y 26 años, del delito de «abuso sexual con acceso carnal por la pluralidad de intervinientes y por la condición de policía»; y al quinto, de 25 años, de «omisión de auxilio».
En el caso de este quinto oficial, las fuentes describieron que el fiscal consideró que podría haber socorrido a la víctima cuando se produjo el abuso.
“Cuando el resto de los compañeros que estaban esa noche se enteraron de lo que pasó, tres policías les dieron una paliza a los que atacaron a la joven”, informaron.
Y añadieron que la dirección general Asuntos Internos de la Bonaerense, a cargo de Darío Díaz, ya interviene en el causa: los cinco detenidos fueron desafectados de la Fuerza.
El caso
Todo sucedió en el baño del polideportivo de Los Polvorines, uno de los dos predios -el otro es en el de Pablo Nogués- que dispuso el municipio para albergar a los 90 policías que les mandó la gobernación Bonaerense para colaborar en las tareas de control por el Covid-19.
«Los dos predios fueron acondicionados para que, 45 agentes en cada lugar, puedan vivir allí mientras cumplen sus funciones, ya que la mayoría son del interior de la provincia y recién recibidos de la escuela de policía Juan Vucetich», señalaron las fuentes, y contaron que también los capacitaron.
Es más, este martes el Municipio sacó un comunicado donde «repudia el abominable episodio de violación denunciado».
Fue en ese marco de convivencia de los policías que se sumaron para reforzar los controles durante la cuarentena que ocurrió el ataque.
Según confiaron a Clarín fuentes de la causa, había unos 14 agentes en el polideportivo y uno de ellos había cumplido años. Y entonces armaron un festejo.
Pero a su vez, de esos 14 se armó un subgrupo en el que estaba la agente que denunció la violación. «Al menos, todos los de ese grupito tomaron bastante», detallaron las fuentes.
Y continuaron el relato como lo recordó la agente denunciante: «En determinado momento, ella y uno de sus compañeros, el que está acusado de no ayudarla, se fueron a uno de los baños del polideportivo para tener sexo consensuado».
Lo que no sabían era que otros cuatro compañeros, todos borrachos y todos ahora presos por violarla, los siguieron.
«Mientras ella se bañaba, el agente con el que había tenido sexo se fue del baño y se cruzó con sus cuatro compañeros que iban hacia las duchas. Sospechó algo, pero igual se fue», describieron.
Los cuatro policías sorprendieron a su víctima.»Ellas les dijo que no la tocaran ni le hicieran nada, pero, de a uno a la vez, la abusaron», señalaron las fuentes.
Mientras tanto, el agente con el que había mantenido relaciones sexuales se acercó a un compañero de mayor rango que seguía en el festejo de cumpleaños y le pidió que fuera a ver qué pasaba en el baño porque sospechaba que la joven podría estar en peligro.
«Fue y avisó, sí, pero no volvió a ayudarla no bien sospechó que algo podría haberle pasado. Lo podría haber evitado», sintetizaron las fuentes el por qué el fiscal considera que cometió un delito por «omisión».
«Ese policía al que le avisaron no fue solo al baño a ver qué sucedía sino acompañado por otros dos», precisaron las fuentes. Llegaron demasiado tarde, a la agente ya la habían violado los cuatro. Los sacaron del lugar a las piñas y la socorrieron.
Clarín.com
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