Los hechos sucedieron cuando Tomás se encontraba junto a sus amigos en la festiva madrugada del Año Nuevo. Lo que inició como un momento de alegría y camaradería pronto se convirtió en una pesadilla cuando, sin previo aviso, un grupo de agresores se abalanzó sobre ellos. La situación escaló rápidamente: Tomás y sus amigos fueron perseguidos, acorralados y, en un giro trágico, el joven fue apuñalado de forma letal en el pecho por uno de los agresores.
El acto cobarde y despiadado arrebató la vida de un joven lleno de sueños y aspiraciones, dejando consternada a toda la comunidad de Santa Teresita. El impacto de este crimen atroz ha resonado profundamente, generando indignación y dolor en aquellos que conocían a Tomás, descrito por sus seres queridos como un joven amable, amigable y con un futuro prometedor por delante.
La rápida respuesta de las autoridades llevó al arresto de ocho individuos presuntamente involucrados en este acto brutal, seis de ellos mayores de edad y dos menores. Entre los detenidos se encuentra el principal sospechoso del homicidio, arrojando un destello de esperanza en la búsqueda de justicia para Tomás y su familia.