“Ya no oculta su edad”, confiesan en el equipo que la asiste en el Enjoy Punta del Este, donde protagoniza la comedia Piel de Judas, su despedida definitiva de los escenarios.
Susana no quiere convertir a su fiesta en un evento público, aunque el cambio de década y la cantidad de invitados -posiblemente la cifra podría coincidir con su aniversario- han generado gran expectativa.
Durante mucho tiempo, la máxima estrella de Telefe decidió festejar en su rancho marítimo de La Florida, en Estados Unidos, pero su actual compromiso teatral la decidió a no moverse de Rincón del Indio, el lugar donde está afincada su mansión de estilo neocolonial, en las afueras de Punta del Este, Uruguay, en medio de un bosque frondoso y a mil metros del Océano Atlántico.
La propiedad, el refugio preferido de la diva, lleva por nombre La Mary, en alusión a la película dramática dirigida por Daniel Tinayre que fue un quiebre en su carrera como actriz. Las 17 hectáreas y el casco con varias suites dignas de un hotel cinco estrellas -inaugurado en el verano de 2006- se convertirán el lunes en el lugar indicado y con todas las comodidades para recibir a sus amigos.
Susana Giménez llega a sus ochenta años manteniendo su aura intacta, siendo la hacedora de un enorme éxito teatral y con la mira puesta en la vuelta de su programa de televisión. A vigencia no le gana nadie.
En ocho décadas, Susana pasó de ser una niña educada pupila a movilizar a un país en traje de baño y diciendo solamente la palabra “¡Shock!”. Suficiente.
Luego fue la joven que sorprendió en la comedia Las mariposas son libres y descolló como vedette en el teatro de revista. Más tarde, se convirtió en La mujer del año, se transformó en Sugar y logró ser inhundible como Molly Brown.
El saludo “¡Hola Susana!” la convirtió en la diva más importante del país, pero muy cercana a la gente. Ese público que la consagró es el que le perdonó todo, incluida la insinuación de la existencia de dinosaurios vivos sobre la faz de la tierra. Lo que a otros le resta, a Susana le ha sumado. Y ni siquiera sus polémicas opiniones sobre la política argentina la han hecho descender del pedestal.
Protagonizó romances explosivos, sus parejas jamás pasaron inadvertidas. Cuando no se hablaba de empoderamiento, ella hizo estrellar un cenicero y plantó bandera. Aunque se empecinó en negar que no era “ni una diva total, ni una mujer fatal”, sabe que hizo historia en la industria del entretenimiento. Logró todo. Susana cumple ochenta y, en plena vigencia de sus funciones estelares, celebrará a lo grande.
A Susana la desvela que no haya miradas indiscretas dentro de su casa y poder festejar en un marco de total intimidad. Sus amigos suelen ser muy fieles a esta premisa y, a diferencia de lo que sucede con otras celebraciones de famosos, respetarán el pedido de la anfitriona e impedirán la circulación de fotos, al menos aquellas que muestren el riñón más privado del encuentro.
Habrá un operativo de seguridad reforzado que se sumará al sistema de vigilancia habitual que posee el lugar, ubicado cerca del Tennis Ranch Punta.
Como es de imaginar, Mercedes Sarrabayrouse, hija de Susana, y Lucía y Manuel, nietos de la estrella, acompañarán a la matriarca de la familia en sus necesidades de último momento. Aunque no tienen la responsabilidad de organizar el encuentro del lunes próximo, está claro que secundarán a la diva en lo que sea necesario. También dirán presente sus hermanos Carolina y Patricio Giménez.
No faltó quien especuló que hace tiempo -con la antelación que requiere la investidura- habría sido cursada la invitación para Luis Lacalle Pou, presidente de Uruguay. El mandatario y la conductora mantienen un muy buen vínculo y hasta se han elogiado públicamente.
Ese amigo del alma
El show principal de la noche estará a cargo de Ramón “Palito” Ortega, quien llegará con su banda, en la que se destaca el histórico músico Lalo Fransen, para salir a tocar cuando esté promediando la noche y, luego de la cena, hacer bailar a todos. El creador de “La felicidad” llegará acompañado por su esposa, Evangelina Salazar.
Si de música se trata, también Patricio Giménez podría ofrecer algunas de sus canciones y no se descarta que haga lo propio el mexicano Cristian Castro. Posiblemente, un video sorpresa repase la vida de la homenajeada.
Verónica Castro llegaría desde Acapulco directamente a Punta del Este y, provenientes de Miami, lo harían Ricardo Montaner y familia y José Luis “El Puma” Rodríguez, todos muy amigos de la cumpleañera.
También daría el presente Sebastián Yatra, el músico colombiano que fue invitado a participar en uno de los especiales que la diva grabó para Telefe y con quien compartió diversas actividades por los barrios de Buenos Aires. En aquel momento, ambos artistas lograron muy buena química.
Ricardo Darín sería la única expareja de Susana que asistiría al cumpleaños. Huberto Roviralta, Jorge Rama y Jorge “Corcho” Rodríguez no fueron invitados a la celebración. En cambio, el prestigioso actor, quien siempre mantuvo una gran amistad con la diva, asistirá acompañado por su mujer, Florencia Bas. El matrimonio se encuentra desde hace varias semanas descansando en Punta del Este.
Las dudas
A la hora de los trascendidos, habían surgido los nombres de Luis Miguel y de Ricky Martin, pero lo cierto es que Susana no mantiene un vínculo tan estrecho con ellos. Además, “El Sol de México” no tendría la mejor relación con Verónica Castro y su hijo Cristian, con lo cual no sería del todo cómodo el encuentro de las celebridades.
Tampoco serían de la partida los integrantes del elenco de Piel de Judas, del que participan Antonio Grimau y Manuela Pal, entre otros intérpretes.
A pesar de los trascendidos, Jorge Lanata tampoco fue invitado a la fiesta. El periodista, que volverá este año a la pantalla de eltrece con su programa PPT, le confirmó a LA NACION que no había recibido ninguna invitación y que, de recibirla, tampoco podría concurrir dado que la fecha coincide con el cumpleaños de su mujer, la abogada Elba Marcovecchio. Tampoco habría sido convidado el peluquero Miguel Romano, quien atiende a Susana desde hace décadas, aunque con algunas diferencias durante los últimos años.
“La Chiqui” con fiesta propia
Llama la atención que la Gala en beneficio de la Fundación del Hospital Materno Infantil de Mar del Plata coincida con la fecha del cumpleaños de Susana. Sabido es que Mirtha Legrand siempre participa de la misma, que se realiza en el Hotel Costa Galana, razón por la cual no acudirá al festejo de su colega al que fue invitada especialmente.
El último sábado, en su regreso a la televisión, “La Chiqui” mencionó la realización de la Gala durante el primer bloque de su programa, confirmando que no volará a Punta del Este para acompañar a su amiga. Ya en una de sus últimas salidas al teatro, se había excusado, pero argumentando que se le “complicaba viajar” debido a las grabaciones de su ciclo de eltrece, aunque tal cosa acontece los días viernes por la noche.
A Susana no le habría caído del todo bien la negativa de Mirtha. Es que la diva siempre le ha dispensado un trato particular, al punto tal de haber ambientado una de las suites de La Mary para ser disfrutada especialmente por su amiga. Cuando Mirtha Legrand cumplió 80 años, Susana Giménez y Teté Coustarot fueron algunas de las amigas que arrendaron un chárter privado y la sorprendieron en Mar del Plata.
En cambio, sí sería de la partida Marcela Tinayre, quien, desde finales de 2023, se encuentra descansando en su casa frente al mar, en José Ignacio, a pocos kilómetros de la mansión de Susana. Tinayre irá acompañada por sus hijos Juana y Nacho y sus respectivas parejas.
Carlos Perciavalle, con quien Susana se habría reconciliado luego de años de distanciamiento, tampoco acudiría, pero porque la diva no lo incluyó en la selecta lista de invitados en la que sí aparece el nombre de Marley. Tampoco habría sido invitada Moria Casán, compañera de teatro de la década del ochenta, quien suele ser crítica hacia la figura de su colega.
Pampita y Valeria Mazza son otros de los nombres que se barajan como grandes olvidadas de la lista de invitados estelares. Con todo, ninguna de las dos modelos forma parte de la “mesa chica” de la agasajada.
Su equipo
Gustavo Yankelevich, productor de Piel de Judas, dará el presente junto a su mujer Rosella Della Giovampaola. Desde ya, también estarán Dolores Mayol e Inés Hernández, amigas y colaboradoras directas -del círculo más íntimo- de la diva, como así también Teté Coustarot, una suerte de “hermana de la vida” de Susana, y la asesora de vestuario Marcela Amado.
Darío Turovelzky, uno de los responsables de la programación de Telefe, ya se encuentra descansando en Punta del Este y fue, desde ya, uno de los primeros invitados en ser confirmados. Desde Buenos Aires volarán Federico Levrino y Guillermo Pendino, autoridades del canal y hombres de muy estrecha confianza de la diva.
Levrino es quien tiene a su cargo la producción de la vuelta del programa de Susana durante el próximo invierno, un desafío nada menor, aunque se trata de un profesional que conoce como nadie a la estrella y al medio, alguien en quien ella descansa a la hora de enfrentar las cámaras.
Luis Cella, el joven productor responsable del exitoso canal de streaming Olga y que fuera productor del formato de Susana, también viajará, junto a su hermana Bernarda, para participar de la fiesta. Ambos son los hijos de Luis Cella, ya fallecido, quien ha sido, durante años, el productor general de los programas de la diva.
Reservas
Se espera que, desde mediados de esta semana, algunas de las celebridades invitadas comiencen a llegar al aeropuerto de Laguna del Sauce y se alojen en los exclusivos hoteles de la península. Las tiendas de flores de Punta del Este -y también alguna de Montevideo- ya han recibido los encargos para ser entregados el lunes en La Mary.
Comenzó la cuenta regresiva. Cuando el sábado baje el telón de Piel de Judas, María Susana Giménez Aubert llegará a su mansión y comenzará a hacer su balance anticipado. Ochenta años no se cumplen todos los días.
Pablo Mascareño