En cuestión de pocos meses, Yalitza Aparicio se ha coronado como una de las mayores celebridades de México.
Su debut como actriz en Roma y su cambio de vida pasando de ser una maestra indígena sin trabajo a codearse con las estrellas de Hollywood ha cruzado fronteras. Y si bien esta mexicana está disfrutando de la experiencia, viajando por el mundo por primera vez, ilustrando portadas de revistas y esperando con ansias la ceremonia de los premios Oscar, ya sufre el lado más oscuro de la fama.
Su nombre se ha convertido en un fenómeno social y cultural en México como uno de los rostros que muchos utilizan para defender la raza autóctona del país, así como la diversidad en una industria del cine centrada en los rostros de siempre. Yalitza proviene de Tlaxiaco, en Oaxaca, un pueblo muy humilde y de pocas viviendas, que está siendo objeto del acoso de los medios y curiosos.
Varios medios de comunicación del país, y hasta youtubers, se han desplazado para filmar su casa y las áreas donde creció, increpando a vecinos y familiares, pidiendo fotos, videos y declaraciones. Por eso, durante una rueda de prensa, la actriz pidió que respeten la intimidad de su familia y vecinos porque el acoso está haciendo que el pueblo se ponga en su contra.
“Muchas personas se han acercado a mí diciéndome que yo mando periodistas, que yo mando a que los molesten, que ellos no quieren. Con eso nada más les pido tener cuidado con la gente, que por educación no quieren y si dicen un ‘no’, respetarlos. Muchas gracias”, expresó sin ningún tapujo.
La polémica también llegó a su puerta hace poco al ser elegida rostro de la marca de ordenadores Lenovo, que celebraba a las mujeres del año. En cuestión de días, la campaña generó controversia debido al blanqueamiento excesivo de su piel.
La imagen ha corrido como la pólvora en Twitter, en donde la publicación de la propia Yalitza con una piel más blanca -y casi irreconocible- ya suma casi 500 comentarios. En su gran mayoría, muchos se preguntan el motivo del blanqueamiento cuando ella está sirviendo como representante para la visualización del pueblo indígena en el país. “No dejes que te blanqueen la piel, tu color es hermoso” le dice un usuario, “¿Cuántos tonos te quitaron?” pregunta otro, mientras otro afirma que “muy orgullosa de su piel de bronce no está” si ha permitido el blanqueamiento.
Yalitza, que llegó al casting de Alfonso Cuarón por acompañar a su hermana y sin haber pensado nunca en ser actriz, es la primera intérprete indígena en estar nominada al Oscar a Mejor Actriz. En las últimas semanas ha aparecido en portadas de revistas de prestigio como Vogue, Vanity Fair y Hollywood Reporter, entre otras, e incluso es la inspiración de una cumbia en su nombre.
Insólito pero cierto, la agrupación Míster Cumbia le dedicó una cumbia que dice, por ejemplo, “Llegaron los del casting, llegaron a Oaxaca, allá donde Yalitza quedó seleccionada. Tener mucho talento ella les demostró, también mucho carisma para la actuación. Pa’ pronto la peli se empezó a filmar, nunca se imaginaban lo que le iba a pasar”.
Al haber sido criticada por algunas compañeras de profesión que afirman que no es actriz, que interpreta un papel en donde no actúa sino que “es ella misma”, o incluso la polémica de Laura Zapata que la calificó de “tener la suerte de las feas”, la cumbia responde: “Yalitza Aparicio es muy criticada y más por esas viejas que están muy estiradas. Yalitza Aparicio con nadie se acostó, nomás con su talento a los Oscar llegó.
Sea como fuere, a Yalitza la vida le sonríe y el 24 de febrero estará entre las primeras filas de los Oscar como candidata a la estatuilla a Mejor Actriz.