Las exparticipantes se habían abrazado y mostrado juntas en las redes sociales tras la salida de la actriz pero duró poco.
Poco duró la reconciliación entre Julieta Poggio y Coti Romero que se vio en la final de Gran Hermano el lunes cuando las mujeres se abrazaron y hasta posaron juntas para una selfie que revolucionó las redes sociales. Apenas un día después, durante El Debate, con la conducción de Robertito Funes ya que Santiago del Moro comenzó sus vacaciones, tuvieron un fuerte cruce en el que una le reprochó a la otra haberla nominado durante su estadía en la casa más famosa del país. Algo que de un lado se vivió como una traición y del otro, como una estrategia de juego.
Fue la participante correntina quien pidió la palabra luego de que Laura Ubfal recordada aquella nominación en la que Coti apuntó contra Julieta y Daniela Celis, luego de que habían acordado no votarse entre las mujeres. Después, además, les negó que lo haya hecho y hasta lloró para que le creyeran. Finalmente, se enteraron por unos gritos desde el exterior y se rompió la relación entre ellas: se dijeron de todo a los gritos, delante de sus compañeros, y Romero terminó diciendo que estaban adentro de Gran Hermano y no en “Gran Amigo”.
“Primero, Laura, ya te expliqué una vez cuando me tocó estar sentada ahí. Parece que no lo entendiste. Lo voy a volver a explicar, y también para la gente que quizás no lo entendió, y para Juli, que no sabe porque estuvo adentro de la casa”, advirtió Coti y continuó: “Yo, cuando hice esa jugada no fue porque fui en contra de las mujeres. También te escuché, Juli, decir que yo te envidiaba y te hablo desde el corazón…”
De inmediato, Poggio negó haberse referido de tal manera, pero Romero ratificó sus dichos: “Lo dijiste adentro de la casa. Y digo: ¿qué tengo que envidiarte yo? Sos una mina hermosa y tenés mucha capacidad, pero yo tengo salud, tengo mi familia completa, un novio que me ama y me hace sentir re bien, tengo una actitud que me llevó a estar en donde estoy ahora. No tengo nada que envidiarle a nadie”.
Mientras escuchaba el descargo de Coti, Robertito Funes advirtió que el reality “era un juego”, pero Julieta lo interrumpió para dejar en claro su forma de pensar: “No todo se justifica igual con que es un juego”.
Y Romero siguió, buscando terminar su concepto: “Cuando yo fui en contra de Juli y de Dani, en realidad no quería que se fuera ninguna de las dos y lo pedí por todos lados. En realidad, yo quería que se vaya Romi, es la verdad”.
Sin embargo, Sol Pérez le recordó que más allá de la nominación, había tratado de “tontas” a sus compañeras, Julieta aseguró que quería ver dichas imágenes, y Coti volvió a pedir la palabra para poder terminar de explicar: “Cuando yo hice esa jugada, era porque sentía que se Nacho estaba en el grupo de Romina, Julieta y Dani, y que él me estaba leyendo muy bien el juego. Tenía que hacer que se ponga en contra de él y decirle: ‘Si vas a placar es porque Nacho te votó’, que es yo lo que dije. Yo sabía que Juli no iba a caer a placa si no era por mis votos, yo quería que caiga para mentirle y decirle que había sido Nacho. Entonces, en la próxima placa las tenía a las chicas en contra de Nacho, y lo queríamos sacar. Fue mi juego. Si bien ella (por Julieta) no me cree, yo quería sacar a Romi”.
Una vez que terminó de escucharla a Coti, Julieta le respondió y tuvieron un fuerte ida y vuelta en el que debió intervenir Robertito pidiendo que no se agredan.
Julieta: —La verdad que todo lo que acabas de decir me parece demasiado rebuscado. Creo que vos hiciste eso para hacerte la jugadora del año y no te salió.
Coti: —O sea, ¿que estás diciendo qué?
De inmediato, Gastón Trezeguet le recordó a Poggio que ella le hizo la Fulminante a Camila, y que tampoco le salió como esperaba porque en aquella placa de nominación terminó yéndose Daniela.
Julieta: —Fue traición. No puede decir que nos nominó y no quería que nos vayamos.
Coti: —Pero, Juli, ¿estás tratándome de hueca? ¿Por qué decís que es rebuscado? Te digo una cosa: yo tuve el mejor promedio desde que soy chiquita. No necesito que nadie me diga…
Al ver que el clima se ponía cada vez más tenso, Robertito pidió que no se “agredan”: “No empecemos con eso. No me hagan sufrir, por favor”. Y Trezeguet advirtió: “Al final tiene razón Laura, se pelean las mujeres”.
Romero siguió hablando, buscando terminar la frase que había comenzado anteriormente: “No necesito que nadie evalúe como soy, pero siento que (Julieta) me está subestimando diciendo que eso fue muy rebuscado. Lo pensé desde el primer momento y ustedes cayeron, chicas, lamentablemente. Si no era por los gritos, yo no iba a estar en placa, pero fue todo mío. Si te dolió, te entiendo, pero ya está. Fue mi juego y si no les gustó, listo”.
Antes de terminar el cruce, Julieta le respondió y ratificó su postura, diferenciando el juego y la convivencia ente los participantes. “A mí me parece que no todo se justifica con que es un juego. No es ‘te lastimo porque es un juego’, ‘te hago llorar porque es un juego’. No es así, porque ahí adentro estamos viviendo, es nuestra vida, no es un juego, son nuestras preocupaciones, las cosas por las que nos hacemos la cabeza. Y no todo se justifica con que es un juego”.