Mientras tanto, el gobierno de Nicolás Maduro ha incrementado la presencia militar en Caracas, anticipándose al 10 de enero, fecha clave en la política venezolana.
Por su parte, María Corina Machado ha convocado a una manifestación 24 horas antes, intensificando la presión desde la oposición.
La visita de González a Washington busca fortalecer los lazos con Estados Unidos y obtener compromisos concretos para la transición democrática en Venezuela. Según fuentes cercanas al opositor, la agenda incluye reuniones con altos funcionarios del Departamento de Estado y líderes del Congreso, además del encuentro con Biden, considerado estratégico para ampliar el apoyo internacional frente al régimen de Maduro.
Refuerzo militar en Caracas
Ante la cercanía del 10 de enero, fecha simbólica para el chavismo, el gobierno ha desplegado efectivos de la Milicia Bolivariana en puntos estratégicos de la capital. El objetivo, según analistas, es enviar un mensaje de fuerza y control. Este movimiento ocurre en paralelo a la ratificación de las autoridades de la Asamblea Nacional oficialista, consolidando el poder del régimen en las instituciones clave.
Machado lidera nueva protesta
La líder opositora María Corina Machado ha convocado a una marcha el 9 de enero, un día antes de la fecha crítica. En su llamado, instó a los venezolanos a salir a las calles para exigir cambios profundos y rechazar el control autoritario del gobierno. “El país necesita unidad y acción, no más miedo”, declaró en un mensaje difundido en redes sociales.
Escenario político tenso
La combinación de la presión diplomática liderada por González, el despliegue militar en Caracas y la convocatoria de Machado marca un momento de alta tensión en Venezuela. Con la mirada de la comunidad internacional puesta en los eventos de los próximos días, el desenlace podría definir el curso de la política venezolana en 2025.