La capital de Ucrania, Kiev, y varias ciudades de ese país fueron bombardeadas este lunes por la mañana por Rusia y la Presidencia instó a la población a “permanecer en los refugios”.
El primer saldo en la capital del país indica ocho muertos y 24 heridos, mientras que aún se está recabando información de los otros objetivos atacados por Putin, entre los que se cuentan Zaporizhzhia y Lviv (Leópolis).
“Ucrania está bajo un ataque de misiles, nos han informado de que muchas ciudades de nuestro país han sido atacadas”, anunció en Telegram un responsable de la presidencia, Kyrylo Timoshenko.
El ejército ucraniano dijo que Rusia lanzó 75 misiles contra Ucrania el lunes por la mañana, con ataques mortales dirigidos a Kiev y a ciudades del sur y del oeste del país.
“Por la mañana, el agresor lanzó 75 misiles. 41 de ellos fueron derribados por nuestra defensa aérea”, dijo el jefe del ejército ucraniano, el general Valeriy Zaluzhny, en Telegram.
Las primeras explosiones en Kiev se sintieron en torno a las 08H15 (05H15 GMT) cerca del centro de la ciudad. Las sirenas antiaéreas sonaron varios minutos antes de las detonaciones.
Además de la capital, se registraron ataques en Leópolis (Lviv), en el oeste, lejos de la línea del frente, así como en Dnipro (centro) y Zaporizhzhia (sur). “Tratan de destruirnos a todos, de borrarnos de la faz de la tierra”, dijo Zelensky en las redes sociales.
Posteriormente la Presidencia confirmó múltiples ataques en distintas regiones.
La arremetida se produce después de que un bombardeo contra zonas civiles en Zaporizhzhia dejó casi 20 muertos durante el fin de semana.
Desde varios puntos de la ciudad se pueden ver columnas de humo negro, según videos que circulan en las redes sociales.
Un periodista de la AFP vio numerosas ambulancias en el centro que se dirigían hacia los lugares de las explosiones.
El último bombardeo en Kiev tuvo lugar el 26 de junio.
Las explosiones se produjeron un día después de que Moscú culpara a Ucrania por la explosión en un puente que une Crimea con Rusia, que dejó tres muertos.
“Los autores, perpetradores y patrocinadores son los servicios secretos ucranianos”, dijo el presidente ruso, Vladimir Putin, sobre el bombardeo del puente de Crimea del sábado, que describió como un “acto terrorista”.
Putin hizo estas declaraciones durante una reunión con el jefe del comité de investigación que creó para investigar el atentado, informaron las agencias de noticias rusas.
El líder ruso se está preparando para una reunión con su Consejo de Seguridad más tarde el lunes, dijo el Kremlin a las agencias de noticias locales.
“Mañana (lunes) el presidente tiene prevista una reunión con los miembros permanentes del Consejo de Seguridad”, dijo el portavoz del Kremlin, Dmitry Peskov.
La explosión que golpeó el puente provocó celebraciones de los ucranianos y otros en las redes sociales.
Pero el presidente ucraniano, Volodimir Zelensky, en su discurso nocturno del sábado, no mencionó directamente el incidente, y los funcionarios de Kiev no se han atribuido directamente la responsabilidad.
El sábado, Rusia dijo que parte del tráfico por carretera y ferrocarril se había reanudado en el enlace estratégico, un símbolo de la anexión de Crimea por parte del Kremlin en 2014.
El puente de 19 kilómetros (12 millas) es un enlace de suministro vital entre Rusia y la península de Crimea anexada.
Algunos analistas militares argumentan que la explosión podría tener un gran impacto si Moscú ve la necesidad de trasladar tropas de otras regiones a Crimea, que ya están en apuros, o si provoca que los residentes se apresuren a irse.
Mick Ryan, un alto oficial australiano retirado que ahora trabaja en el Centro de Estudios Estratégicos e Internacionales en Washington, dijo que incluso si Kiev no estuvo detrás de la explosión, constituyó “una operación de influencia masiva ganada para Ucrania”.
“Es una demostración para los rusos y el resto del mundo de que el ejército de Rusia no puede proteger ninguna de las provincias que anexó recientemente”, dijo en Twitter.
(Con información de AFP y AP)