Autoridades estadounidenses, incluidas las agencias de Comercio, Defensa y Justicia, investigan si estos dispositivos, que Microsoft señala como vulnerables a ciberataques, representan una amenaza a la seguridad nacional.
Preocupaciones por seguridad cibernética
TP-Link controla el 65% del mercado estadounidense y ha sido acusada de no colaborar con investigadores para corregir fallos de seguridad. Según informes, miles de sus dispositivos han sido utilizados en ataques dirigidos a organizaciones occidentales, gubernamentales y proveedores del Departamento de Defensa.
En respuesta, la administración Biden evalúa medidas para limitar la presencia de TP-Link, mientras que también considera eliminar por completo a China Telecom de la infraestructura de telecomunicaciones estadounidense. Esta iniciativa sigue políticas previas, como la orden de la administración Trump en 2019 para retirar equipos de Huawei Technologies.
Investigaciones y tensiones geopolíticas
En junio, la Oficina de Tecnologías y Servicios de Información prohibió la venta de productos de la empresa rusa Kaspersky en EE.UU. y podría usar la misma autoridad contra TP-Link. Además, el Comité Selecto de la Cámara de Representantes sobre el Partido Comunista Chino solicitó una revisión especial de los routers de la compañía, destacando un «grado inusual de vulnerabilidades».
Aunque TP-Link ha negado las acusaciones y asegura cumplir con las leyes estadounidenses, la empresa enfrenta críticas por sus vínculos con proyectos de investigación del gobierno chino. Por su parte, la portavoz de TP-Link en EE.UU. expresó su disposición a colaborar con las autoridades para garantizar que cumplen con los estándares de seguridad requeridos.
Impacto global
La preocupación no se limita a EE.UU.: Taiwán ha prohibido los routers de TP-Link en instituciones gubernamentales, e India ha emitido advertencias sobre sus riesgos de seguridad. Aunque no se ha presentado evidencia directa de que TP-Link esté involucrada en ciberataques patrocinados por el estado chino, los incidentes recientes aumentan las tensiones.
Un mercado en transformación
De implementarse la prohibición, el mercado de routers en EE.UU. podría experimentar cambios significativos. TP-Link ha intentado distanciarse de China mediante la relocalización de su sede a California y cambios en su estructura corporativa. Sin embargo, un litigio reciente en Texas reveló vínculos estrechos entre sus operaciones en EE.UU. y China, lo que complica su estrategia.
La discusión sobre la seguridad de dispositivos tecnológicos importados continúa en el Congreso, mientras Estados Unidos busca equilibrar la seguridad nacional con el libre comercio y la innovación tecnológica.