Tras 24 años de trabajo intenso, la Fundación Sentir cuenta con un nuevo edificio, el Centro Educativo Terapéutico “Sentir IV” que funcionará en Los Alisos, cubriendo la demanda de atención integral que requieren los niños y jóvenes con discapacidad de toda la provincia.
La construcción del edificio se realizó en base a la Ley de Cheques 25.730 que destina fondos a los programas y proyectos a favor de las personas con discapacidad.
En el ingreso al nuevo edificio ubicado en el Club Campo de Atalaya se concretó el acto protocolar de apertura, con la presencia de la ministra de Desarrollo Humano, Ada Galfré; el fiscal de Estado, Mariano Miranda; la directora de Inclusión para Personas con Discapacidad, Belén García Goyena; la presidente de la Fundación Sentir, Stella Maris Toro; cuerpo docente, estudiantes y familiares.
Una de las primeras en hablar y expresar su agradecimiento por la tarea que brinda el Centro Terapéutico fue Alicia Romero, cuyo hijo asiste a la institución. Entre sus palabras también destacó la labor de los docentes que “dedican su tiempo y esfuerzo para cumplir con su vocación, la más noble, que es la de estar al lado de los que más lo necesitan, nuestros chicos”.
Posteriormente, tomó la palabra Galfré, quien transmitió los saludos y felicitaciones del Gobernador Gerardo Morales por la inauguración del nuevo edificio, pero también para dejar en claro que el Estado se pone a disposición de todas las actividades y acciones que se puedan desarrollar en conjunto con Sentir en “pos del empoderamiento de todas las personas de Jujuy y de aquellas que tienen una discapacidad de acuerdo a lo que establece la Convención Internacional de los Derechos de las Personas con Discapacidad”, dijo.
La funcionaria resaltó la decisión política del Mandatario provincial de “romper el modelo biomédico” con el cual se estaba trabajando, es decir solo lo atinente a la cuestión de la salud o las dificultades que padecían las personas con discapacidad para hacer hincapié en el empoderamiento y derechos de las personas. “No podemos pensar una sociedad integrada sino brindamos herramientas. El Estado ha recuperado su rol a través de la Dirección de Inclusión de Personas con Discapacidad que ya abrió un centro y queremos abrir en los municipios cabecera de cada departamento”, agregó.
La funcionaria destacó la endereza y el coraje de los familiares de seguir adelante ante “una situación inesperada”, ya que tenían dos posibilidades: la anestesia o potenciarse y en un proceso de resiliencia sacar lo mejor de uno para crecer. “Ellos eligieron seguir y el ejemplo es Sentir, de sacar lo mejor de cada uno trasladándolos a cada uno de nuestros chicos”.
En tanto, la Presidente de la Fundación Sentir manifestó su alegría por el “sueño cumplido, un sueño hecho realidad” el cual significó 24 años de esfuerzo.
“Nunca nos desviamos del camino, sabíamos hacia donde queríamos llegar, lo que queríamos hacer. Sabíamos que nos iba a costar mucho. Fue un gran esfuerzo", afirmó y añadió que "hemos contado financiamiento de un programa nacional que nos ha permitido concretar un viejo sueño y el aporte incondicional de muchas personas”.
Asimismo, enfatizó que la conclusión de la obra se debe a que se han respetado los valores de las personas y enumeró “el profundo amor, la vocación de servicio, el cuidado hacia la minoría que más lo necesita y el respeto al prójimo". "Quien no trabaje por el otro, quien no respeto al prójimo, quien no se ocupe del que más lo necesita que trabaje de otra cosa porque se equivocó de camino”, reflexionó.
Además dijo estar segura de la labor que están realizando en beneficio de la comunidad aunque reconoció que todavía falta mucho por hacer.
Finalizando, la directora García Goyena elogió la tarea que realiza Sentir "sobre todo a pulmón” y con el aporte de la sociedad civil. "Desde el Estado -indicó- van a acompañar y apoyar para que siga creciendo y brindando el mejor servicio a toda la comunidad".
Tras las palabras alusivas, el diácono Carlos Aisama realizó la invocación y bendición de las instalaciones. Las autoridades procedieron al tradicional corte de cinta y posterior recorrido de la institución.
Un poco de historia
Sentir inició sus actividades en 1992, brindando el servicio de Estimulación Temprana conjuntamente con los talleres de pintura, teatro y expresión corporal.
Durante ese ciclo lectivo, por demanda de los padres de niños con diversos diagnósticos que precisaban educación y tratamiento especializados, se crea el “Jardín Terapéutico” destinado a niños de 2 a 5 años y se realiza la apertura de consultorios en áreas de fonoaudiología, psicomotricidad, psicología y kinesiología.
Entre los años 1996 y 1997 surgió la necesidad de brindar Apoyo Pedagógico a los niños con trastornos de aprendizajes integrados en escuelas comunes, por lo cual se efectiviza el apoyo a la inclusión: itinerancias, asesoramientos y orientación con equipos de profesionales a las escuelas inclusivas.
Durante los años 1997,1998 y 1999 se dio continuidad a terapias, se amplían algunos servicios y se implementa la colonia de vacaciones con actividades recreativas y acuáticas.
En 1998 debido a la demanda se reorganizan los servicios y se creó una nueva sede Sentir II.
Desde el 2008 las sede Sentir I y Sentir II, plantean la formación laboral con actividades y propuestas acordes a la edad, potenciando el desarrollo integral de la persona.
En 2010 se abrió Sentir III “Centro Terapéutico y de Formación Laboral”.
Las tres sedes son espacios alquilados por la Fundación por lo que en el 2012 se presentó el proyecto de construcción edilicia a la Ley de Cheques, siendo aprobado dando lugar al Centro Educativo Terapéutico “Sentir IV”, contando con la toda la infraestructura adecuada para su funcionalidad.