Las tarjetas de crédito son herramientas muy útiles para financiar gastos y compras pero hay prácticas muy comunes que pueden terminar arruinando la economía personal y traer muchos dolores de cabeza.
El sobreendeudamiento y los costos innecesarios son los principales problemas en los que suelen caer los usuarios que hacen un uso descontrolado del plástico.
Si bien puede servir para ayudar a adquirir productos o afrontar gastos para los cuales los ingresos resultan insuficiente, uno no debería olvidar que, cada vez que se usa, se está generando una deuda que luego habrá que afrontar.
Como todo, la clave es usarla en su justa medida, sin excederse. A continuación, un detalle de los errores más habituales que se suelen cometer al usar una tarjeta de crédito y algunos consejos para evitarlos.
¿Cuáles son los 5 errores más comunes que se comenten al usar la tarjeta de crédito?
1. Tener muchas tarjetas
Hoy en día es común tener varias tarjetas de crédito, pero ¿Es una buena idea? Si desea tener más flexibilidad y recompensas a través de puntos y descuentos, resultará más conveniente que lo que una sola tarjeta puede ofrecer. Pero antes de decidir una cantidad, habrá que tener en cuenta cómo se manejará el peso de la deuda y las necesidades del estilo de vida de cada uno.
Muchas veces, bancos o comercios grandes como los supermercados, otorgan estos plásticos como forma de captar y retener clientes. Sin embargo, es importante que esta oferta no maree. No se necesita tener un montón de tarjetas para afrontar los gastos y los riesgos de terminar gastando más de lo que ingresa son muchos.
Por un lado, multiplica varias veces los costos de mantenimiento y renovación. Y, además, hace difícil llevar un control de lo que se gasta y lo que se tiene que pagar cada mes porque está todo disperso.
Lo ideal es tener una o dos tarjetas por familia. Se pueden tener adicionales para los distintos miembros, pero estará todo concentrado en un mismo resumen y con los mismos límites de gastos.
2. No conocer los costos de mantenimiento ni de financiación
Con las tarjetas se pueden realizar muchas operaciones pero muchas de ellas tienen costos.
Según explicó el economista y director de la consultora Focus Market, Damián Di Pace, a Clarín, «uno de los errores más comunes es que los consumidores desconocen por lo general y no prestan atención a la tasa nominal anual, tasa efectiva anual, y costo financiera total de las tarjetas, que es lo que incluye todos los impuestos y los cargos administrativos de la tarjeta».
Recientemente el Banco Central (BCRA) subió la tasa que pasó del 43% al 49%. La mayoría ve ese porcentaje actualizado pero no repara en el costo financiero total que hoy es de 75%», resaltó.
Asimismo, también tiene costo el uso en cajeros automáticos fuera del país, por ejemplo, para extraer adelantos en efectivo. Todo eso encarece el uso de la tarjeta y forma parte del costo financiero total.
Antes de contratar una nueva tarjeta de crédito es importante conocer de cuánto es este gasto, para evitar sorpresas.
3. Pagar el resumen sin revisarlo primero
Es común que se tenga el pago de la tarjeta en débito automático y sea abonado con el dinero de la cuenta personal sin prestarle demasiada atención.
Esto es otro error porque podría pasar que se estén cobrando gastos que no se hayan realizado, costos ocultos que no se habían considerado y otras situaciones que no podemos controlar si no se revisa el resumen todos los meses.
4. Comprar algo solo porque tiene descuento
Las promociones y los beneficios con las tarjetas de crédito suelen resultar muy atractivos para los consumidores. Pero las compras por impulso es lo que más se desaconseja hacer.
La tarjeta de crédito debería estar para comprar algo que se esté necesitando. Los gastos los debe decidir el usuario y no los bancos o comercios con sus promociones.
De esta manera, se estará evitando contraer deudas que luego no van a poder pagarse y saldrán mucho más caras que el descuento que se quiso aprovechar. Por otra parte, saber qué se está pagando permitirá ordenar los pagos en los meses siguientes.
5. Abonar el pago mínimo
Este es uno de los errores más caros que cometen quienes usan tarjetas de crédito. Esta práctica es la responsable de que muchas personas terminen con deudas varias veces superiores a lo que compraron y, muchas veces, impagables.
Al pagar sólo el monto mínimo del resumen, el resto se convierte en una deuda que genera intereses desde el momento del vencimiento. Si al mes siguiente se hace lo mismo, esos intereses del primer mes se capitalizan, o sea se transforman en deuda y, junto con el saldo anterior, generan nuevos intereses para el período que sigue.
De esa manera, se va haciendo una “bola de nieve”. Como nunca se cancela todo el vencimiento, cada vez se debe más.
Para evitarlo es aconsejable pagar siempre el saldo total del resumen a la fecha de vencimiento.
LN