El amarillamiento que afecta las plantaciones de tabaco en nuestra provincia son consecuencia del cansancio de las tierras. La planta amarilla es la evidencia de la raíz muerta, advirtió el especialista Rainer Kunz.
“Pero por suerte hay experiencias en nuestra provincia para prevenir o disminuir estas pérdidas. Una solución eficaz, económica y fácil de implementar”, aseguró. “Se trata de una fertilización orgánica con humus de lombriz probada con resultados muy positivos en pequeñas fincas tabacaleras y de otros cultivos”, afirmó el especialista.
“La experiencia mundial en diversos cultivos y también en tabaco, demuestra que el humus de lombriz y sus subproductos, son una excelente alternativa en situaciones de suelos cansados’, reveló. En este sentido señaló que “el humus de lombriz es parte de la novedosa agricultura sin suelo desarrollada y expandida en todo el mundo en los últimos 30 a 40 años. Ahí directamente no hay suelos. Pero aun así hay agricultura”, explicó.
“Su aplicación en los suelos tabacaleros cansados como los nuestros es importante no sólo por los nutrientes que se incorporan a los terrenos, sino también por la capacidad que tienen estos microorganismos en defender a nuestras plantaciones de enfermedades y de liberar el fósforo, potasio y otros elementos que se encuentran bloqueados”, afirmó.
Cabe destacar que “el impulsor de esta alternativa es el Ing. Samir Quintar, a cargo del emprendimiento agropecuario Proyajo, que viene trabajando fuertemente en los últimos años en el desarrollo de la lombricultura y a partir de la misma en la elaboración del lombricompuesto y subproductos, con el objeto de mejorar los suelos desgastados por el monocultivo en la provincia de Jujuy”, reveló.
PRUEBAS EN FINCAS TABACALERAS
Respecto a las características y beneficios de esta fertilización orgánica probada en algunas fincas tabacaleras en los últimos años dijo que “el humus de lombriz no solo aporta nutrientes sino también una cantidad de antibióticos de compuestos que destruyen y combaten los enemigos que existen en estos suelos muy desgastados por la falta de materia orgánica”, explicó. Así también “le da una mayor esponjosidad al suelo, es decir, más aire a la raíz del tabaco que es muy sensible al exceso de agua”, agregó.
Luego hizo notar “le brinda una mayor capacidad de retención del agua útil por lo que las plantas entre riego y riego siempre tienen un día más de reserva, beneficio que hemos notado en plantaciones con un mejor vigor y desarrollo a diferencia de las otras”, finalizó el reconocido especialista en tabaco.