En un partido en el que el arbitraje se quedó todas las miradas, Vélez se llevó tres puntos valiosos de su visita a River en el estadio Monumental. El conjunto de Gabriel Heinze superó a los de Marcelo Gallardo por 2-1 en el duelo válido por la séptima fecha de la Superliga.
El Millonario llegaba a este encuentro con una serie de bajas que generan preocupación, sobre todo de cara a los choques con Boca por las semifinales de la Copa Libertadores. Mientras que Nicolás de la Cruz y Lucas Pratto no fueron de la partida ante El Fortín, Matías Suárez se repuso de la molestia con la que terminó el duelo del miércoles por Copa Argentina ante Godoy Cruz y pudo estar de arranque.
Del lado de Vélez, sorprendió la ausencia -definida a último momento- de Fernando Gago. Desde el club informaron que el ex jugador de Boca Juniors sufrió una sobrecarga en los isquiotibiales que lo marginó del duelo.
En un encuentro que comenzó algo desprolijo, con imprecisiones de ambos lados, Vélez avisó primero y lo hizo a los 13 minutos, con un centro de Lucas Janson que Lucas Robertone cabeceó desde el piso y que controló Armani.
Los locales respondieron a los 17′, con un centro de Milton Casco desde la izquierda que sacó con lo justo la defensa. La primera acción polémica de la noche llegó cuando, sobre los 26′, el arquero Lucas Hoyos se llevó puesto en el área a Matías Suárez y el árbitro Andrés Merlos dejó seguir el juego. Todo River reclamó penal y Marcelo Gallardo fue amonestado por su vehemente protesta.
El tramo final de la etapa encontró a Vélez mejor parado y con mayor peso en el campo rival. Fue en ese momento cuando aprovechó su chance y se puso en ventaja. A los 37′, Franco Armani sacó corto desde el arco y Robertone, de cabeza, habilitó a Nicolás Domínguez, quien capitalizó el desorden de la defensa y definió cruzado para marcar el 1-0.
El Millonario quedó golpeado por la conquista y el conjunto de Gabriel Heinze ganó en confianza. Así, estuvo cerca de lograr el segundo lugar con una acción casi calcada, pero esta vez Maximiliano Romero terminó la jugada con un remate desviado.
Aún en su momento de confusión, River pudo empatarlo, pero el travesaño le negó el grito a Nacho Fernández luego de una avanzada con pelota dominada y un potente disparo de media distancia.
El cambio de mentalidad del Millonario fue claro de cara a una segunda parte en la que se volvió claro dominador. Los del Muñeco salieron a atropellar al rival y generaron su primera chance para igualar al minuto de juego, con un cabezazo de Rafael Santos Borré que tapó Hoyos.
A los 14′ llegó el empate y fue producto de una gran incursión en ataque de Lucas Martínez Quarta. El defensor avanzó por la izquierda y mandó un centro por lo bajo que Nacho Fernández empujó debajo del arco para marcar el 1-1.
La presión de River fue en aumento y así también su presencia en el campo de Vélez. Una vez más Martínez Quarta se hizo fuerte en ofensiva y estuvo cerca de marcar el segundo gol de su equipo con una pirueta desde la medialuna que se estrelló en uno de los palos.
En el cierre, el arbitraje de Merlos se robó el protagonismo. Sobre los 35′ Thiago Almada se llevó la pelota con la mano pero esto no fue advertido por el árbitro. Zuculini y Montiel fallaron en la contención y el jugador de Vélez quedó mano a mano con Armani, quien terminó cometiéndole penal. El local reclamó la la mano del inicio de la jugada, pero el juez hizo caso omiso. Finalmente, Almada marcó el 2-1 desde los doce pasos.
En el minuto 42′ pasó de todo y Hoyos se calzó el traje de héroe del Fortín. Primero, le tapó un gran remate de tiro libre a Nacho Scocco. Luego, se lució con una espectacular atajada en el penal que ejecutó Nacho Fernández. La pena máxima había nacido de una jugada en la que Merlos cobró una mano de Nicolás Domínguez, cuando la pelota había impactado en el cuerpo del futbolista. Producto de esa acción, además, el de Vélez había visto la segunda amarilla y se había ido expulsado.
Así Vélez consumó su cuarta victoria consecutiva en un certamen en el que suma 13 puntos y se ubica cuatro por debajo de Boca Juniors, que es el único líder de la Superliga.
River -que sumó una preocupación por la molestia con la que salió Enzo Pérez en la segunda parte- perdió luego de dos fechas y, con 11 puntos, se aleja de los puestos de vanguardia del certamen.