El equipo de Leonel Puvoa señaló a Hernán Gómez, colaborador del esposo de Nicole Neumann, quien respondió a través de su abogado. ¿En qué consiste su reclamo?
El caso de los disparos que recibió el auto de Leonel Pernía en la última fecha del Turismo Nacional (TN) del año pasado, durante la cual el Tanito aseguró su segundo título en la Clase 3 en Viedma, ha tomado un nuevo rumbo. En esta situación, Hernán Gómez, conocido como el Goma y miembro del equipo de José Manuel Urcera, fue señalado por el equipo del exfutbolista. Tras cuatro meses de silencio, la parte acusada ha respondido y ha advertido sobre posibles consecuencias legales.
El abogado de Gómez, Damián Torres, en conversación con Infobae, detalló la estrategia para contrarrestar las acusaciones realizadas por el propietario del equipo, Mauro García. «Todo esto está mal hecho», afirma sobre la otra parte, refiriéndose a la traslación del Ford Focus del exlateral derecho de Boca Juniors a Pergamino, sede del equipo MG-C, y la presentación de la denuncia en dicha ciudad bonaerense en lugar de realizar todos los trámites en la jurisdicción del incidente, Viedma.
«Esperamos tres o cuatro meses para que la investigación fiscal avanzara. Una vez que obtuvimos respuesta, decidimos iniciar una querella para limpiar el nombre y el honor de mi defendido, que ha sido mancillado», anticipa Torres.
Torres proporcionó a este medio el documento de la fiscal Estela Passarelli, el cual indica que «en relación a su representado, Sr. Hernán Gómez, si bien ha sido mencionado por los denunciantes, hasta esta instancia no existen imputaciones ni elementos objetivos que permitan fundamentar sospechas sobre su participación en el incidente investigado».
«Aproveché el fin de semana para visitar el Autódromo de Viedma y conocer el lugar de los hechos», revela el abogado. «La querella se dirige contra Mauro García. Enviamos la carta documento, y si no se retractan públicamente, iniciaremos una demanda penal que citará a la otra parte a una audiencia de mediación».
«No se pudo demostrar que los supuestos disparos ocurrieran en el autódromo o que los agujeros mostrados posteriormente fueran causados allí. Además, hay aspectos que no concuerdan. Por ejemplo, ¿por qué los agujeros no fueron detectados durante la verificación técnica? De ser así, las autoridades del evento (Automóvil Club Argentino) deberían haber contactado a la policía y cerrado el autódromo. Además, el auto nunca habría salido de Viedma. Lo llevaron a Pergamino y surgieron más agujeros. Otro punto es que se denuncian cuatro disparos: para acertar a un auto que va a 200 km/h, tendrías que ser un miembro del SWAT. Y por último, y más importante: no se ha establecido vínculo alguno entre Gómez y los disparos. De haber existido una amenaza por un incidente similar, el TC no habría corrido este fin de semana», argumenta Torres.
Asimismo, señala que «no se pudo probar que los supuestos disparos se produjeran en el autódromo. La pericia balística realizada fue de carácter privado». Y advierte que «esto no se resolverá con dinero. Queremos una retractación y, de no obtenerla, presentaremos una denuncia penal».
«Esta semana enviaremos la carta documento a Pergamino solicitando una retractación. Tendrán 30 días para responder. De lo contrario, los denunciaremos penalmente por difamación. En unos tres meses, aproximadamente, si la mediación no resuelve el asunto, se determinará si llevamos el caso a juicio. También tomaremos medidas contra aquellos que hayan perjudicado a Gómez en las redes sociales», anticipa Torres.
La tipificación en el código penal se encuentra en el artículo 113 y establece que «quien publique o reproduzca, por cualquier medio, injurias o calumnias inferidas por otro, será sancionado como autor de las injurias o calumnias en cuestión, siempre que su contenido no se atribuya de manera sustancialmente fiel a la fuente pertinente. En ningún caso constituirán delito de calumnia las expresiones relacionadas con asuntos de interés público o las que no sean afirmativas». Las sanciones son económicas y los artículos 109 y 110 establecen multas de 3.000 a 30.000 pesos y de 1.500 a 20.000, respectivamente.
Frente a esto, Torres explica que «si los jueces los condenan, se les impone una multa y queda abierta la posibilidad de una acción civil para solicitar compensación económica. Si no lo hacen, los jueces publicarán la sentencia en los mismos lugares donde se originaron los agravios. El objetivo es restaurar el honor, no llevar a las personas a prisión».
«Pero no hay un interés económico aquí para nosotros, sino limpiar el honor de Hernán, que es muy apreciado en Las Grutas y es amigo mío. Yo también soy conocido de Manu Urcera», reconoce.
En la última fecha del campeonato anterior del TN, disputada el 18 de noviembre pasado, Pernía y Urcera compitieron por el título, y Manu, originario de San Antonio Oeste, perdió en su propia casa al correr en Viedma. Aunque los primeros indicios de los impactos se descubrieron en el autódromo de Río Negro, el propietario del equipo de Pernía, Mauro García, decidió regresar rápidamente a Pergamino con su equipo y el martes 21 presentó la denuncia policial.
Es importante recordar que debido a la jurisdicción del incidente, la Unidad Fiscal de Instrucción N°1 de Pergamino, a cargo del fiscal Pablo Santamarina, presentó una declinatoria ante el Juzgado de Garantías del juez César Solazzi, y la denuncia fue remitida a Viedma, donde la fiscal Estela Passarelli está a cargo de la investigación.