Por la segunda semana del Rugby Championship, Los Pumas perdieron contra Sudáfrica por 29-10 en el Nelson Mandela Bay Stadium, de Port Elizabeth.
Era la oportunidad para reivindicarse, luego de un comienzo flojo contra el mismo rival la semana anterior. Lo cierto es que el conjunto argentino lució un nivel muy bajo, fue ampliamente superado y sufrió otra dura caída. Lo más preocupante: los albicelestes hicieron 21 penales.
Frente a los campeones del mundo, los Pumas comenzaron el partido incomodando a Sudáfrica en varias acciones, a puro tackle con un espíritu combativo. Pero también volvieron incurrir en la indisciplina y concedieron cinco penales en los primeros diez minutos. Por esa vía llegaron los primeros 9 puntos del partido a través de los penales de Handre Pollard (9-0).
Los primeros puntos de la Argentina, a los 25 minutos, llegaron por intermedio del pie derecho de Domingo Miotti, que debutó como apertura en lugar del apagado Nicolás Sánchez. Ignacio Mendy resultó otro de los que entró de inicio. El autor del try que sentenció el bronce frente a Gran Bretaña en Tokio 2020 se lució en el rugby de 15 en la etapa de juveniles.
Argentina no frenó con sus infracciones. En los primeros 30 minutos, una estadística devastadora: 10 penales concedidos (Rodrigo Bruni fue amonestado). Lo aprovechó constantemente Pollard, que en ese lapso marcó los 15 puntos de los Springboks. Es por eso que los errores de manejo o los penales desbarataron las pocas chances albicelestes. Y cuando eso no ocurría, la intensidad sudafricana se encargó de repeler los tibios ataques.
Sin dudas, el punto a destacar en los primeros 40 minutos resultaron los 13 penales que cometieron los Pumas, contra seis de su rival. Un detalle: en el compromiso de la semana pasada, los argentinos concedieron la misma cantidad de penales a lo largo de los 80 minutos de juego. Los locales, en tanto, se apoyaron en el valor de su pack de forwards, un maul predominante y un uso prolijo del pie.
Con muchas opciones de juego para los sudafricanos, el primer try del partido, a los 5 minutos del segundo tiempo, fue de Makazole Mapimpi. El wing voló y apoyó cerca de la bandera izquierda (22-3). Los Springboks aumentaron la distancia tras una combinación entre line y maul que cerró Malcolm Marx (29-3).
Permanentemente, Sudáfrica jugó con paciencia. Cada vez que encontró espacios para atacar, los aprovechó. Concentrados, sólidos, siempre con su libreto. A lo largo de todo el partido lucieron muy superiores al conjunto argentino, que cuando intentó no pudo generar más de dos o tres fases de juego. Los Springboks frustraron a sus rivales y fueron quienes dictaron el ritmo. Se hicieron dueño del terreno e impusieron condiciones.
El golpe, otra vez, es duro para los Pumas, que en el cierre decoraron el marcador con un try de Pablo Matera. El equipo de Mario Ledesma volvió a chocar con un cohesionado y disciplinado conjunto sudafricano. Queda la preocupación por el bajo nivel de los argentinos, que terminaron el compromiso marcados por la indisciplina y los 21 penales concedidos contra el campeón mundial.
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