La franquicia de Florida consiguió su primer título; la Pulga convirtió durante el partido y desde los doce pasos; consiguió su título número 43 e igualó al brasileño Dani Alves
La final de la Leagues Cup entre Inter Miami y Nashville se fue a los penales tras el 1-1. Que pudo ser 2-1 para el equipo rosa, pero no lo fue por cómo perdió increíblemente un gol en la última jugada del tiempo regular un compañero de Lionel Messi. Luego, el capitán de Inter y goleador durante el partido, no tuvo problemas para convertir su disparo, el primero de la serie de cinco, que terminó siendo de diez remates por equipo.
Lo mismo hicieron Sergio Busquets, Leonardo Campana y Kamal Miller. Pero Elliot Panicco, arquero de Nashville, le detuvo su tiro a Víctor Ulloa. En el local anotaron todos salvo Randall Leal. La definición fue a la muerte súbita, es decir, a miniseries de un penal por conjunto. Sergey Krivtsov, Jordi Alba, Diego Gómez, Víctor Ruiz y DeAndre Yedlin, compañeros de Messi, anotaron sin problemas. Los lanzadores de Nashville también convirtieron. Hasta que les tocó el turno a los arqueros.
El de Inter, Drake Callender, se transformó en héroe. Marcó un golazo desde el punto de penal, fue hacia el arco y atajó el disparo de su colega Panicco. Messi, entonces, comenzó la carrera para abrazar a su compañero. ¡Inter campeón por primera vez en su existencia!
El golazo que… no fue
Era la última jugada del partido. El ecuatoriano Campana, de Inter Miami, había quedado solo frente al arquero Panicco. El goleador, con pasado en Wolverhampton, de la Premier League, intentó sortear al guardavallas resolviendo de emboquillada. Lo hizo, pero perdió ángulo para definir. Se deslizó para llegar al balón y enderezar la trayectoria. Pero el balón dio en el palo cuando su marcador, el último defensor de Nashville, había quedado en el piso. Desde Messi hasta Tata Martino, todos en Inter Miami se tomaron la cabeza, incrédulos. Era el gol del triunfo; el del trofeo. El gol de la Leagues Cup.
Hasta Gary Smith, entrenador de Nashville, se preguntó cómo era posible que ese balón no hubiera entrado y que Campana hubiese desperdiciado una chance tan clara. Lo mismo pensó la mayoría de los 30.000 espectadores que cubrieron el Geordis Stadium, el recinto exclusivo de fútbol más grande de Estados Unidos. La final se fue entonces a los penales. Y en ellos prevaleció Miami luego de que los 22 jugadores de campo ejecutaran.
Messi llegó así a la plusmarca de 43 trofeos, igualando al brasileño Dani Alves. Ambos son los futbolistas más laureados de la historia. Como la Pulga sigue en actividad, es probable que supere esa marca, ya sea en la selección argentina o en la franquicia de Florida. Por lo pronto, el rosarino fue protagonista excluyente de la primera conquista en la breve historia del equipo de camiseta rosa, iniciada en 2018.
Nada mal para un plantel que estaba último en la MLS cuando se confirmó la llegada del rosarino, proveniente de PSG. Junto a Martino y los españoles Busquets y Alba (todos, ex de Barcelona), es referente de este logro, muy festejado por el plantel y el cuerpo técnico. Desde el consagrado Messi hasta el jovencito Benjamín Cremaschi (18 años), estadounidense hijo de argentinos y una de las figuras de Inter durante el tiempo regular del encuentro en el estadio de Tennessee.