El pase a la fase de grupos por la Copa Libertadores de América está en juego y en el duelo de ida, disputado en el estadio Atanasio Girardot, Independiente Medellín, le ganó 1-0 a Atlético en la ida de una serie que, por lo observado esta noche, quedó abierta en su definición.
El elenco de Bobadilla no logró ejercer un dominio sostenido sobre los tucumanos, que en el segundo tiempo -tuvieron sus mejores momentos del partido, con Ramiro Carrera, uno de los hombres más destacados del equipo de Zielinski.
Un balón perdido en la mitad de la cancha le costó caro al «Decano» y Ricaurte, en 15′, definió contra un palo para sellar el marcador final.
Atlético tuvo un par de aproximaciones sobre los dominios de Mosquera y en el segundo tiempo se situó en terreno colombiano en busca de la paridad.
El ajustado tanteador dejó todo abierto para la revancha en El Monumental.
El desquite está concertado para el próximo martes en El Monumental y el ganador de la llave completará el Grupo H de la Libertadores, junto a Boca Juniors, Libertad de Asunción y Caracas FC.
Fue la primera vez que se enfrentaronn estas escuadras. El «Albiceleste» venía de eliminar en el primer cruce a The Strongest (Bolivia) y el «Poderoso de la montaña» dejó afuera al Táchira, de Venezuela.
Independiente Medellín enfrentó 11 veces a cuadros argentinos en Libertadores y sólo ganó tres de sus encuentros: a Boca de local (1-0) en 2003 y a River Plate de visitante (2-1) en 2017, y hoy al «Decano».
El registro numérico de Atlético fuera de casa es negativo: perdió en nueva de sus 12 salidas y no pudo convertir en las últimas cinco, con saldo de un empate y cuatro reveses.
Un dato llamativo para el «Decano» es la productividad que alcanza con su juego aéreo la red contraria: 11 de sus últimas 18 conquistas fueron de cabeza.
Independiente Medellín: Andrés Mosquera; Didier Delgado, Jesús David Murillo, Andrés Cadavid y Yulián Gómez; Adrián Arregui; Larry Angulo, Andrés Ricaurte, Javier Reina, Maicol Balanta; Juan Fernando Caicedo. DT: Aldo Bobadilla.
Atlético Tucumán: Cristian Lucchetti; Marcelo Ortiz, Dylan Gissi, Guillermo Ortiz y Gustavo Toledo; Guillermo Acosta, Cristian Erbes, Ariel Rojas y Ramiro Carrera; Javier Toledo y Lucas Melano. DT: Ricardo Zielinski.
CONFIANZA EN LA REVANCHA
Es ya una broma conocida en el ambiente del fútbol, mencionar la típica pregunta que suele hacer el periodismo deportivo al jugador, después de un partido: “¿Sensaciones?”. Una consulta tan amplia como desganada. Pero después del 0-1 que encajó Atlético en Medellín ante Independiente, el lugar común entre signos de interrogación puede servir para explicar lo que pasó (y lo que puede pasar) en la llave de la fase 3 de la Copa Libertadores.
La sensación, justamente, es que el resultado no es tan malo, pese a la derrota. No tan malo en sí mismo y no tan malo en comparación con el que obtuvo en la fase 2 ante The Strongest en La Paz (0-2). Así lo dijeron sus protagonistas que lamentaron la derrota, pero que piensan que la ventaja es exigua.
Es cierto, el equipo de Ricardo Zielinski está un sólo gol abajo en la serie ante los colombianos. Pudo haber sido mayor pero también pudo haberse traído el empate. El rival no lució avasallante y el escenario estaba dado para convertir un gol. Ese gol que sencillamente Atlético parece no poder hacer en condición de visitante. Hizo uno solo en el año (Javier Toledo a Racing) y lleva cinco partidos consecutivos en la Copa Libertadores sin hacerlos. Allí donde tanto cuentan.
Porque en la sensación de que “se lo puede dar vuelta”, no entra la posibilidad de que Medellín haga un gol en el Monumental. Es que si lo hace, Atlético deberá hacer tres y con lo que le está costando marcar (cuatro en siete partidos), parece una misión difícil de conseguir.
Atlético deberá apostar nuevamente por un gran partido sin errores en su área y la de su rival. Parece siempre autoxigirse demasiado y depender de “otra actuación histórica”. Claro, la confianza está porque ya tuvo esas actuaciones a lo largo de su experiencia internacional. “En Tucumán va a ser un partido durísimo. Tenemos que hacer un partido bárbaro allá”, admitió Zielinski, tras el partido. Otro partido bárbaro más como el que tuvo que hacer en Quito ante El Nacional, ante Junior en el Monumental en 2018 y ante The Strongest, la semana pasada.
Pero, como quedó dicho antes, la sensación es distinta a la que quedó tras el 0-2 ante The Strongest. Una montaña más chica de escalar pero -también hay que decirlo- con un mejor equipo en frente.
¿Por qué Atlético no pudo marcar ese bendito gol de visitante? El entrenador salió al campo con un equipo impredecible y aún más raro del que presentó ante Argentinos. Con Gustavo Toledo de lateral izquierdo, Lucas Melano de delantero y Leandro Díaz en el banco. En esa posición, a Melano se le achicó el espacio para recorrer con sus desbordes tradicionales y tampoco se entendió con Javier Toledo. Ni él ni Leandro Díaz cuando entró pudieron ayudar a convertir. En ese partido “bárbaro” que deberá volver a hacer, será clave que los delanteros vuelvan a convertir.
Aún así, el equipo controló la pelota en buena parte de los 90 minutos. Fue en el principio del segundo tiempo cuando estuvo más cerca de marcar gracias a los arranques de Ramiro Carrera, figura “decana” y a Melano, que bajó para recibir la pelota.
Al final, el temor a recibir el 0-2 hizo que Atlético empiece a acomodarse a la sensación de que el 0-1 no estaba mal. Sobre todo sabiendo que Táchira le ganó 2-0 en Venezuela a este “DIM”.
En conclusión, las sensaciones son más buenas que malas para Atlético, que perdió y sabe que deberá volver a hacer un “gran partido”, pero que -por experiencia- sabe que puede hacerlo.
Fuente: La Gaceta