El Rojo y la Academia animaron un intenso partido bajo la lluvia. El Rojo sacó diferencia porque fue más efectivo.
Independiente volvió a festejar en un clásico de Avellaneda: por la quinta fecha de la Liga Profesional, le ganó 1-0 a Racing en el estadio Libertadores de América. Silvio Romero, en el complemento, marcó la distancia para el dueño de casa, que se encaramó en soledad en la cima de la tabla de posiciones con 11 unidades, una más que Lanús, Colón y Newell’s, los tres escoltas.
El partido se inició con muy buen ritmo, a pesar de los obstáculos que propuso la lluvia. Con dibujos parecidos de uno y otro lado, los dos elencos le imprimieron dinámica a la llegada hasta tres cuartos de campo. Sin embargo, la Academia fue más incisiva. Un remate cruzado de Correa, un centro de Mena que el ex Ferro y Copetti no consiguieron empujar, y un intento bien direccionado de Licha López, representaron el peligro generado por la visita.
Pero el Rojo contrarrestó a fondo. Primero, con un enganche y envío venenoso de Velasco, que forzó a Arias a dar un rebote peligroso. Luego, con el centro de Bustos y el remate de Roa que Sigali salvó en la línea. Por último, con el desborde y buscapié de Palacios que Silvio Romero no alcanzó a conectar de lleno.
A los 45′, fue Racing el que quedó con el grito atragantado: Correa remató, un rebote le dio imprevisibilidad a su tiro, pero Sosa reaccionó como arquero de handball y rechazó con un pie.
La segunda parte comenzó con el mismo frenesí y los dos conjuntos siendo generosos en despliegue y búsqueda. Tras una atajada de Sosa, Chancalay perdió una oportunidad inmejorable, con el arco desguarnecido: se deslizó para tomar el rebote y su intento dio en el palo. Instantes después, Palacios derrapó para conectar un centro y no llegó por centímetros y porque el agua acumulada en el césped ralentizó su movimiento.
Hasta que a los 23 minutos del complemento, Fabricio Bustos alargó para Palacios, quien falló el primer toque al medio, pero el rebote lo favoreció. Allí, sí, habilitó a Romero que, de cabeza, puso el 1-0.
Ya en ventaja, Independiente dio un paso atrás para evitar dejar espacios y apostar a la contra. Racing empujó, pero sólo consiguió inquietar con centros o jugadas aisladas, en un campo de juego que se fue poniendo cada vez más complicado con el discurrir del cronómetro.
Fueron cinco los minutos de descuento, que se transformaron en casi siete por la gresca que se desarrolló junto a los bancos, que mostró a Pizzi, con el paraguas, intentando separar. Finalmente, el árbitro resolvió la situación con dos tarjetas amarillas.
El Rojo volvió a ganar un clásico, algo que no conseguía desde 2017, y lo celebró con ganas. Cimentó su victoria en haber sido más efectivo que su rival y, una vez más, dejó la sensación de que si a su tridente de armado (Palacios, Roa y Velasco) le acercan juego, puede dar batalla seria en el torneo.
Formaciones:
Independiente: Sebastián Sosa; Fabricio Bustos, Sergio Barreto, Juan Insaurralde, Lucas Rodríguez; Lucas Romero, Lucas Gonzále;, Andrés Roa; Alan Velasco, Sebastián Palacios; Silvio Romero. DT: Julio César Falcioni
Racing: Gabriel Arias; Juan José Cáceres, Leonardo Sigali, Nery Domínguez, Eugenio Mena; Leonel Miranda, Aníbal Moreno; Enzo Copetti, Licha López, Tomás Chancalay; Javier Correa. DT: Juan Antonio Pizzi