Boca hizo gala este viernes de la jerarquía de sus individualidades para imponerse por 1-0 a Vélez en La Bombonera, en una velada en la que no le sobró nada perteneciente a la quinta fecha de la Liga Profesional 2024.
El equipo de Diego Martínez cumplió en irse al receso por a Copa América con una sonrisa pero sabe que tendrá que mejorar para dejar atrás su irregularidad. Los de Gustavo Quinteros confirmaron su escasez de relevos ante cualquier baja imprevista, de lo que deberían ocuparse en el mercado de pases.
En el primer tiempo, ambos conjuntos buscaron ser protagonistas manejando la pelota en tres cuartos de cancha, pero dependieron mucho de los errores rivales y fallaron a la hora de dar la puntada final. Un cabezazo de Francisco Pizzini apenas desviado y un cabezazo de pique de Edinson Cavani en offside que despejó en la línea Valentín Gómez tras un resbalón de Tomás Marchiori fueron las chances más claras por bando, hasta que el encuentro se enredó en su propia intensidad y primaron las imprecisiones por sobre el buen fútbol.
El complemento arrancó accidentado para la visita, con inconvenientes que impactarían en su destino. Primero, Marchiori volvió a mostrarse errático y acusó lesión; debió ser reemplazado por Lautaro Garzón, el pibe que jugó en las últimas fechas de 2023 cuando el Fortín se salvó del descenso y suele ser cuestionado por su escasa altura (1.80). Enseguida, se sumó la baja de Damián Fernández, ingresando en el fondo Patricio Pernicone, con apenas un puñado de minutos en Primera.
A los 15 minutos, en un ataque xeneize, Cristian Medina habilitó de emboquillada a Cavani para que éste cabeceara por sobre Garzón, que a mitad de camino no pudo desviar ni estirándose al máximo. Con más espacios, se hizo más claro el dominio de pelota de los de Liniers, que se toparon con Sergio Romero con un mano a mano de su tocayo Braian.
En un tramo final vibrante, Garzón tapó una complicada pelota de Lautaro Blanco y salió pelea generalizada cuando canchereó Cavani, lo empujó Christian Ordoñez, Valentín Gómez agarró al uruguayo de atrás recibiendo de él un codazo y luego el delantero se desquitó con un codazo y pegándole a Ordoñez. Fernando Echenique se sacó el problema de encima echando al goleador y también al mediocampista de Vélez.
En la gran chance del extenso tiempo adicionado, Valentín Gómez le dio trabajo a Chiquito, y la cuota de preocupación para Boca llegó con la lesión y lágrimas del ingresado Aaron Anselmino. La última escena de una velada caliente llegó con Quinteros expulsado por el juez por protestar. Duchas para todos, que se viene el parate.